ANTICAPITALISTAS CANARIAS exige que sea obligatorio tener el test para entrar en las islas

Considera que se debe proteger a la población residente en Canarias como prioridad

En Canarias será obligatorio para los turistas hacerse el test tres días antes de alojarse en una instalación hotelera. Así lo recoge un decreto-ley urgente de la Consejería de Turismo aprobó este jueves el Consejo de Gobierno. En ese decreto se libera a hoteleros y a propietarios de pisos vacacionales de abonar la prueba que recaerá sobre el turoperador o el visitante. Canarias al quedar como único territorio libre del estado de alarma verá incrementada la presión turística.

Las medidas que propone el decreto-ley turístico del gobierno canario incluye la obligación de hoteles, apartamentos y viviendas de pedir la prueba a la persona visitante en el momento en que va a realizar la inscripción de alojamiento (check-in), pero nos parece insuficiente, consideramos que se debe imponer ese control sanitario antes de que se empiecen a mover en las islas.

El referido decreto-ley modifica las leyes de Turismo y Actividades Clasificadas, modifica así la Ley 7/1995 de 6 de abril de Ordenación del Turismo de Canarias , facultando a los establecimiento hoteleros y extra hoteleros a exigir como requisito la admisión para viajeros el haberse hecho test negativo de coronavirus, como más tarde, 72 horas antes de la entrada al alojamiento. Los residentes que pretendan alojarse tendrán que hacer una declaración responsable en la que conste que no han salido del Archipiélago en las dos semanas anteriores.

También el Gobierno ha dispuesto que Sanidad se haga cargo de la atención de los viajeros que se infecten. En Tenerife, el Cabildo ha puesto a disposición de Sanidad las 24 viviendas bioclimáticas del Instituto Tecnológico de Energías Alternativas, ITER.

Consideramos que aunque la medida aumenta la seguridad ante la llegada de turistas, no puede evitar por completo que lleguen personas contagiadas porque puede ocurrir que el test no detecte a un contagiado reciente, de cuatro días antes de su llegada y porque muchos viajeros, canarios o no, no se alojan en instalaciones turísticas. La medida más segura es obligar a todos a test antes de la venida y al salir. Lo que no parece posible, dado el volumen de tráfico, es controlar a todos los viajeros en los aeropuertos.  

En la medida en que está habiendo una gran afluencia de turistas al ser incluida Canarias como destino seguro en varios países, tenemos que exigir que esa normativa se aplique en origen, que se ponga máxima atención a la salud de la población canaria y de las y los trabajadores del sector turístico, que se exija a las empresas que faciliten los medios y la máxima protección a sus plantillas.

El gobierno justifica esta vía decreto ley por motivos económicos y de salud pública. Si fuese por motivos de salud pública lo que no es de recibo es que no se dote a la sanidad pública canaria de mayores recursos humanos y una mayor partida presupuestaria. La salud pública para este gobierno se reduce en este caso en facilitar y garantizar el máximo beneficio al empresariado.

La celeridad con la que el gobierno que preside Ángel Víctor Torres actúa frente al declive del turismo debería de tenerla frente a la crisis social alarmante o ante la crisis climática y ecológica que se vive en el Archipiélago. No tardó nada en echarle un cabo al empresariado con la quiebra del Thomas Cook, los ERTE vinculados al turismo, ante el fin del plazo de materialización de la RIC o ahora para salvar el negocio turístico.

Aparte de ocuparse de que vengan turistas, sería más necesario que nunca ver al gobierno canario ocupado en favorecer políticas públicas sostenibles, social, ecológica y económicamente en beneficio de la mayoría de la población.

Canarias, a 30 de octubre de 2020

Anticapitalistas Canarias