·        El actor hispano-suizo Moisés Mato ofreció en el Campus de Humanidades su emocionado monólogo “Imposible matar la belleza” antes de ofrecerlo nuevamente en Tafira

·        Este miércoles hay previstos sendos talleres en la Facultad de Ciencias de la Educación y el IES La Herradura, en Telde

Las Palmas de Gran Canaria, 26 de enero de 2016.- Un centenar de jóvenes asistió este martes en el salón de actos de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria a  la representación del monólogo "Imposible matar la belleza”, del actor y director hispano-suizo Moisés Mato, organizada por el Cabildo con motivo del Día Escolar de la No Violencia.

Nacido en la ciudad suiza de Basilea en 1966, Moisés Mato es el creador del  llamado “teatro de la escucha”, tras una investigación sobre teatro social llevada a cabo entre 1992 y 2006. Es actor, autor y director teatral, pedagogo y poeta visual y ha estado detrás de otras interesantes experiencias escénicas.

La actividad forma parte del programa de la Consejería de Solidaridad Internacional del Cabildo de Gran Canaria, que organizó dos sesiones con el monologuista, la segunda de ellas por la tarde en el Instituto Superior de Teología de Canarias del Campus Universitario de Tarifa, en el marco del programa de  “Gran Canaria Solidaria”, informó el consejero del área, Carmelo Ramírez.

En este contexto, el Cabildo ha previsto otros dos actos en instalaciones de la Universidad y en el IES Lomo de la Herradura, que mañana a partir de las o.50 será escenario del "Taller de Solidaridad y Creatividad desde la Acción No Violenta". 

Ya por la tarde, a partir de las 16.00 horas, tendrá lugar en el gimnasio de la Facultad de Ciencias de la Educación un segundo taller titulado "Por una cultura de la Paz y la No Violencia".

El programa cuenta con la colaboración de Teatro del Abrazo, Noviolencia 2018, Pastoral Universitaria y la Universidad.

“Gran Canaria Solidaria” incluye actividades a lo largo de todo el año dirigidas a formar, denunciar y sensibilizar a los grancanarios de los problemas que asolan a los pueblos empobrecidos, que suponen el 80 por ciento de los habitantes del planeta, unos 5.500 millones, recordó Carmelo Ramírez.