Declaración de Anticapitalistas Canarias ante el 1º de Mayo de 2020

Este 1 de Mayo la clase trabajadora a escala mundial está ante el desafío de la pandemia ocasionada por un nuevo virus para el que aún no existe tratamiento específico, ni vacuna, con gran velocidad de propagación y el riesgo de que muchas personas que no han presentado síntomas puedan contagiar la enfermedad.

En los países más industrializados del mundo, con las economías más poderosas, más globalizados e interconectados, el virus ha desvelado la fragilidad de este sistema basado en el derroche de energía, suelo, agua, recursos naturales, que provoca el cambio climático, el agotamiento de recursos y pone en grave riesgo la supervivencia de las sociedades que conocemos.

El neoliberalismo ha desregulado y privatizado los sistemas públicos de protección y atención, desde la Sanidad a la Educación, las pensiones o el cuidado de dependientes y mayores. Levanta la bandera de la competencia, la competitividad, el interés individual, la no intervención de organismos públicos para satisfacer el derecho a la salud, que convierte en un negocio. El capitalismo ha probado, por el contrario, que solo una Sanidad pública, universal y gratuita para los pacientes puede atajar la pandemia y cuidar de todas las personas. Ahora, eludiendo su responsabilidad en el deterioro de la Sanidad pública culpan de sus deficiencias a los demás y piden el aumento del gasto público, no de los ingresos fiscales. Mientras, intentan beneficiarse de cualquier manera, alquilando instalaciones, vendiendo material y medicinas y especulando con la salud.

En Canarias, dependiente del turismo, que genera el 35% del PIB y emplea, directa o indirectamente al 40% de la población ocupada, nos encontramos con la paralización casi total de la actividad con la expectativa de recuperación lenta, que tardará varios meses. Las empresas, ante el cierre casi total, han presentado ERTE por causa de fuerza mayor que duraría el tiempo del estado de alarma, aunque ya la patronal ha pedido que se prolongue varios meses, hasta final de 2020. Se trata de poder disponer de trabajadores esenciales, pero sin necesidad de pagarles.

Las ayudas para quienes quedan en paro, para autónomos, para pequeños empresarios, corren a cargo de la Administración, pero no abarcan a eventuales, a quienes vencen contratos, sino a los de contrato fijo. Pero la mayor parte está sin cobrar el mes de abril.

Desde el 14 de marzo, muchos no han cobrado más que el tiempo trabajado ese mes. No cobrarán prestación por desempleo hasta el 10 de mayo. Quienes no tienen derecho a prestación, ni ningún ingreso pueden acogerse, desde ayer la prestación mínima vital, que se concede por unidad familiar en una cantidad que va desde los 367 hasta los 478 euros, que se pagará a un límite de 40.000 familias por una cantidad máxima de 16 millones de euros.

Los autónomos que facturen menos del 75% de lo que correspondiese al mes anterior al inicio del paro, pueden solicitar ayuda, a cobrar en mayo.

También se ofrecen préstamos con aval público para alquiler de vivienda, y moratoria de pago de hipotecas durante seis meses. Pero eso, como mucho, aumenta la deuda, que luego habrá de pagarse. No es cierto que no se pueda desahuciar. Pasado el plazo, se puede si no se paga.

Las ayudas son aplazamiento de pago, no anulación de deuda.

La crisis ha dado lugar a que se sumen posiblemente más de 200.000 personas al paro, de las que, probablemente casi la mitad no tienen prestación por desempleo.

Canarias tenía más de un 30% de la población en riesgo de pobreza, casi 700.000 personas, antes de la crisis.

Frente a esa situación de penuria, el Gobierno canario y los grupos de oposición empezarán en pocos días a debatir “un plan de reconstrucción económica,” paralelo a la propuesta de nuevos Pactos de la Moncloa que hizo Pedro Sánchez. Esos pactos, en 1977 significaron la congelación salarial, la flexibilidad laboral, la disminución de gasto social. Quieren de nuevo que seamos la clase obrera la que paguemos con reducción salarial y paro sin prestaciones, la recuperación de sus beneficios.

Sánchez en Madrid, Torres en Canarias no pretenden gravar a las empresas con beneficios, ni a las grandes fortunas. Lo que destinan para ayudar a las empresas no sale de ingresos fiscales, sino de aumento del déficit y la deuda, que supondrán recortes en el gasto público.

No debemos consentir que, igual que en 2008, la recuperación de beneficios del capital caiga sobre nuestras espaldas:

Que las empresas con beneficios paguen impuestos. Abajo la Reserva de Inversiones de Canarias (la RIC). Disposición del dinero no pagado para gasto social.

Los servicios públicos, la Sanidad, la Educación, la dependencia deben ser adecuadamente financiados, respondiendo a las necesidades sociales. Lo mismo, las pensiones de jubilación y no contributivas. Lo público no se vende, se defiende.

Reclamamos la derogación de las reformas laborales y de las pensiones, que han empeorado las condiciones de trabajo y las pensiones públicas.

Reivindicamos que la pensión mínima, la prestación mínima de desempleo y las prestaciones sociales de emergencia sean el equivalente al salario mínimo interprofesional.

CONTRA LA EXPLOTACIÓN DE CLASE, CONTRA LA OPRESIÓN DE GÉNERO, CONTRA LA XENOFOBIA Y EL RACISMO:

NATIVA O EXTRANJERA, LA MISMA CLASE OBRERA.

Canarias, a 28 de abril de 2020.

ANTICAPITALISTAS CANARIAS