El pasado jueves, 6 de febrero, en Tamkouta, cerca de Gao, dos todoterreno ocupados por familias tuaregs que regresaban del mercado, fueron vilmente atacados. Resultado 35 muertos, entre los que se encontraba una madre que amamantaba a su bebé, muertos y 6 heridos. Las tropas de  ocupación,  ONU, franceses y malienses miraron para otro lado y continúan haciéndolo.

El viernes 7 de febrero, Moussa AG ASSARID, representante en Europa  del Movimiento Nacional de Liberación de Azawad y Carlos Ortiz de Zárate, autor de la novela El principado de la Fortuna, iniciaban una campaña informativa “La actualidad de las poblaciones de Azawad”, precisamente para alertar de los horrores a los que están sometidos estas ciudadanas y ciudadanos, en la Casa Torre de Santurzi (Bilbao). Se invitó a africanistas, especialistas de Derecho Internacional Público o de Relaciones Internacionales, asociaciones y organizaciones implicados en el tema, a partidos políticos y, obviamente se enviaron comunicados de prensa a todos los medios. Muchos fueron los llamados y muy pocos los que vinieron.  Éramos pocos, pero desbordábamos de calor humano. Los medios de comunicación nos ignoraron. Hacen como las tropas de ocupación, como Mali, como Francia, como ONU

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