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viernes, 29 de marzo de 2024 08:08h.

No queríamos el Premio Canarias, solo coherencia y dignidad - ATIRACAN

ATIRACAN agradece la solidaridad de todas aquellas personas que han colaborado en la campaña “1 euro contra el petróleo”. La solidaridad no es caridad, no es moneda de cambio, es una cuestión de coherencia y dignidad.

No queríamos el Premio Canarias, solo coherencia y dignidad - ATIRACAN

Que la posición del presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero Baute, era contraria a las prospecciones petrolíferas en Canarias lo conocía la ciudadanía. Los que compartimos reuniones con él, además escuchamos en reiteradas ocasiones que nunca se abandonaría a los activistas de esta lucha ante las adversidades, varias veces lo expresó.

Pero los actos son los que definen a las personas y no sus palabras. Ante la petición de solidaridad ante represión sufrida por ATIRACAN, el silencio ha sido la respuesta, un silencio negro, negro de cómplice y negro de traición.

La solidaridad no es caridad, no es moneda de cambio, es una cuestión de coherencia y dignidad.

Presidente de ATIRACAN

Jesús Rodas Medina

 

ATIRACAN agradece la solidaridad de todas aquellas personas que han colaborado en la campaña “1 euro contra el petróleo”

 

Vivimos en una sociedad en la que manifestarse contra las decisiones del Gobierno es penado con multas, en la que las leyes están hechas a su medida y en la que ni tan siquiera te dan la posibilidad de la defensa porque lo que dice la autoridad tiene valor de prueba, es una sociedad autoritaria y, por lo tanto, totalmente injusta.

 

ATIRACAN lo ha sufrido en sus propias carnes, sin embargo no han conseguido acabar con nosotros, que era su objetivo, a través del ahogamiento económico, y esto ha sido posible porque hay personas que tienen un nivel de conciencia superior al de la competitividad y el egoísmo, tienen conciencia solidaria y son capaces de ver que el apoyo a los compañeros de lucha, no sólo es justo, sino necesario para poder seguir adelante, en nuestro caso luchando contra todo tipo de acciones contra nuestro medio marino y, en general, contra nuestra naturaleza.

 

Hoy el  pago de las dos multas es una realidad, hemos conseguido un fin común y ello ha sido gracias a su solidaridad,  es tan grande el poder de la solidaridad que, cuando la ponemos en práctica, nos hacemos inmensamente fuertes y podemos asumir sin temor los más grandes desafíos, al tiempo que resistimos con firmeza los embates de la adversidad.

 

La solidaridad, cuando persigue una causa noble y justa, cambia a quién la recibe y a quién la da, lo hace mejor y más digno.

Muchísimas gracias, seguimos luchando.