Sí se puede pregunta al pleno de Santa Cruz de Tenerife por las gestiones para garantizar la inversión en el Balneario comprometida por Rosa Dávila

Pedro Fernández Arcila recuerda al alcalde Bermúdez que la consejera de Hacienda anunció una aportación superior a los cuatro millones de euros

Sí se puede preguntará al grupo de gobierno de Santa Cruz de Tenerife  cuáles han sido las gestiones del equipo de gobierno para garantizar la inversión a la que se había comprometido la consejera de Hacienda del Gobierno de Canarias, Rosa Dávila, para la recuperación del Balneario de la capital tinerfeña.

El portavoz del grupo municipal ecosocialista en la corporación, Pedro Fernández Arcila, recuerda que Dávila se comprometió destinar a la reparación de los elementos estructurales del Balneario la cantidad de 1.083.000 euros, dentro de una inversión total de 4.257.000 euros para lograr abrir el edificio al uso público.

El compromiso de la consejera fue resultado de “la campaña realizada por la Plataforma en Defensa de El Balneario y a raíz de una pregunta formulada por la parlamentaria de Podemos, Asunción Delgado Luzardo”, subraya Arcila en el preámbulo de su pregunta, que dirige al pleno que se celebra el próximo viernes, 25 de noviembre.

El portavoz de Sí se puede señala que las declaraciones públicas de Dávila, que se comprometió en este sentido en sede parlamentaria, “tuvieron mucho eco entre los vecinos de la capital, ya que el Balneario siempre ha sido una referencia como dotación pública”. Arcila destaca que esta instalación es considerada por la ciudadanía de Santa Cruz como “de enorme interés para los barrios más cercanos pero, en general, muy necesaria para todos santacruceros y santacruceras”.

Arcila asegura que “siempre hemos depositado muchas esperanzas por logar la recuperación de este edificio para el disfrute público” y recuerda al alcalde José Manuel Bermúdez que el grupo de gobierno municipal de CC-PP está obligado por un acuerdo unánime del pleno de la corporación, que adoptó en febrero pasado una moción de Sí se puede en la que se respaldó la propuesta de la plataforma vecinal para instar a concretar el plan de rehabilitación anunciado por Dávila.

La citada moción incluía la activación de un plazo de participación vecinal para consensuar colectivamente los usos del antiguo Balneario, que a juicio del citado colectivo ciudadano debe destinarse a uso recreativo, deportivo y sociosanitario.

El PGO de Santa Cruz incluyó el Balneario en el catálogo patrimonial, por el valor histórico del edificio, obra del arquitecto Domingo Pisaca Burgada; esta situación obliga al propietario a mantener estos valores culturales. Sin embargo, el Gobierno de Canarias es propietario del edificio desde 1983 y, bajo su custodia, ha ido sufriendo un progresivo deterioro hasta encontrarse en la actualidad en una situación realmente lamentable.

Aunque el Ayuntamiento capitalino no es el propietario, es indudable que le corresponde desempeñar en este asunto un papel fundamental de dinamización, apoyo y empuje para recuperarlo y devolverlo a la ciudad, contando con la opinión de la ciudadanía.

Desde sus orígenes, el Balneario ha estado vinculado a la iniciativa de representantes municipales, como el alcalde García Sanabria, que supo  ver en él un proyecto social de gran alcance, tanto es así que este espacio público, a lo largo de sus ochenta años, generó unos incalculables beneficios para la ciudadanía que proyectaron ganancias inmateriales a varias generaciones. “Lo que le falta en estos momentos a la capital tinerfeña no es solo una infraestructura de estas características, sino un alcalde comprometido con su ciudad, como lo fue el artífice de la instalación en 1928”, según ha manifestado Arcila.