La RSP DE JINÁMAR, se solidariza con la Comunidad La Esperanza de Guía de Gran Canaria

La Red de Solidaridad Popular de Jinámar (RSP) se solidariza con las 77 familias de la “Comunidad la Esperanza” que ocupan, desde 2012, un edificio abandonado por la empresa  Inversiones Piornedo,  en la urbanización Pineda de Guía, Gran Canaria.

Todas las familias de dicha comunidad, empobrecidas por la crisis, buscaron remedio a su necesidad de tener un techo digno, mientras  los poderes públicos que tienen la obligación (según el art. 47 de la Constitución) de promover las condiciones necesarias y establecer las normas para hacer efectivo el derecho a la vivienda,  se “cruzaban de brazos y miraban para otro lado”.

La RSP denuncia que las amenazas del  gobierno de Nueva Canaria y el Alcalde de Guía suponen un ataque brutal a los derechos más elementales de estas familias, al querer expulsarles sin ofrecerles alternativa habitacional.

La Comunidad La Esperanza (que se  suministra con agua de cubas, que pagan entre todos y  que  tienen conexión de luz,  de obra),  siempre han reclamado que se les permita regularizar esta situación de precariedad.

La RSP denuncia la insensibilidad y el “hostigamiento “ que el alcalde D. Pedro Rodríguez  y Nueva Canarias llevan a cabo contra las personas más vulnerables de su municipio, al notificarle el abandono voluntario de las viviendas, que hoy sirven de hogar a estas 77 familias (más de 200 personas con predominio de menores),  y el requerimiento a las compañías suministradoras para que corten el agua y la luz.

De persistir el acoso del Alcalde a las familias de La Comunidad La Esperanza, estaría contribuyendo a sembrar el pánico, a incrementar la angustia y desesperación de estas familias muy vulnerables, asó como  a crear una emergencia humanitaria en Guía.

Exigimos a Nueva Canarias y al Alcalde de Guia, que no se ceben con los más empobrecidos, que desistan de desalojar a estas familias y que se ocupen de atender a quienes más lo necesitan, tal y como prometieron en sus programas.

La RSP pide al gobierno de Guía que colaboren con estas familias empobrecidas, censándolas en el padrón municipal, restableciendo los suministros vitales de agua y luz. Y en caso de ser imprescindible su desalojo, se les busque antes, una alternativa habitacional (a la que tienen derecho), que sea digna y asequible a la situación económica de los afectados.

Denunciamos que desde el Gobierno de Canarias no se promuevan viviendas sociales, cuestión que es imprescindible porque a estas familias y muchas más empobrecidas,  les es imposible o tienen graves dificultades para acceder al mercado  de la vivienda.

La RSP, que promueve la solidaridad y el empoderamiento de las personas, entiende que tienen derechos y  que la unidad de los afectados, la lucha y la solidaridad es el único camino para garantizar los derechos más elementales.  Por ello la RSP estará  presente el lunes 11 de marzo, delante del Gobierno de Canarias, siendo solidaria con la Comunidad La Esperanza, porque sus reivindicaciones son justas y porque se trata de necesidades vitales para estas familias.