Socialistas

COMUNICADO: Precariado, desempleo, menos democracia... Manifestamos:

SOCIALISTAS no es una opción electoral en estos momentos y en estas elecciones. SOCIALISTAS entiende la necesidad de construir un partido socialista, que defienda con contundencia y veracidad los interesas de las clases trabajadoras, las personas empobrecidas, excluidas, jóvenes, discapacitadas y combatir el patriarcado. SOCIALISTAS por tanto tiene unos objetivos políticos que trascienden las elecciones generales. Pero no por ello, no nos preocupa lo que estos momentos acontece y los problemas que sufren las clases populares.

Es por lo que vemos con preocupación la fortaleza de las derechas, el PP y la emergente sustituta de Ciudadanos. La división de la izquierda al concurrir partida y el despiste que ello puede generar, facilitando al nuevo tripartito una mayoría de escaños. Nos preocupa por las condiciones de vida tan negativas para las familias trabajadoras y sencillas y la cada vez más creciente desigualdad que sufren, así como el imparable crecimiento de la pobreza que estas sufren, tengan empleo o no.

Los derechos laborales gracias a las dos reformas laborales son papel mojado. Ha surgido una nueva clase obrera sin derechos ni posibilidades de defensa alguna, gracias a las dos reformas laborales y la llamada ley mordaza. El precariado juvenil que campa por la hostelería, las cadenas comerciales y el comercio de los sectores privatizados. Los nuevos servicios atendidos por falsos autónomos y un fraude cada vez más generalizado en la contratación, con salarios cada vez menores. La expulsión del “mercado de trabajo” de personas maduras, pero con plena experiencia, capacidad y proyectos de vida que mantener. Es por eso que la renta básica que reivindicamos y nuevos planes de empleo eficientes se hacen imprescindibles.

La falta de enfrentamiento serio a las políticas de austeridad que Gobierno del PP y Unión Europea imponen. La deuda pública convertida en negocio privado gracias al Banco Central Europeo y los nuevos tratados llamados de libre comercio, como el TTIP o el TISA suponen una nueva amenaza que de cuajarse, todavía creará más pobreza y menos derechos salariales y laborales y laminará definitivamente la libertad sindical, pero también liquidará nuestra agricultura y muchas pequeñas industrias. Por no hablar de los repagos, las privatizaciones en el sector público y las agresiones a una enseñanza pública de calidad. La disminución de prestaciones sociales, seguros de desempleo cada vez con menos dotación y disminución escandalosa en las partidas asignadas a violencia de género y la dependencia, están siendo sencillamente criminales.

Podíamos seguir. Pero SOCIALISTAS entiende que las clases trabajadoras, autónomos negocios, familiares y economía social, lo que necesitan son soluciones a sus problemas cotidianos y sabemos que estas soluciones existen. Basta con dejar de transferir dinero público a la banca privada, las multinacionales e instaurar medidas de justicia fiscal, para comenzar a cambiar las cosas. Frenar la dependencia de una injusta Europa-alemana y también de independencia y soberanía con respecto a los EE.UU y sus proyectos transatlánticos y militaristas. Hay dinero, pero muy mal repartido.

En consecuencia pedimos a los contendientes electorales, claridad y programas concretos pero claros que implementen la creación de empleo mediante planes de choque reales, realizables y cuantificados. Los que desempleadas y desempleados quieren es trabajar. Empleo que de paso que se crea, sea útil al objeto de erradicar el precariado y la contratación basura. El salario y la relación capital-trabajo, deben estar en la campaña electoral.

Requerimos:

-Posición crítica y desafiante con la Unión Europea. Otra Europa es imprescindible y esta solo favorece privatizaciones y a las grandes multinacionales. No estamos en la Europa de los pueblos, sino de los mercados.

-Independencia y no más gastos militares, lo cual implica la salida sin paliativos de la OTAN y de las bases militares extrajeras. Política exterior que favorezca el multilateralismo, la paz y el comercio justo.

-Iniciar el proceso constituyente. La monarquía no solo representa una mera forma de gobierno, sino que es la clave de bóveda de un sistema injusto y oligárquico que controla nuestras vidas en el estado español y lastra cuando no impide, más democracia, más justicia, reparto. Poniendo fin al control real del Estado por parte de poderosas familias e intereses extranjeros en nuestro territorio. La existencia o no de monarquía, no es un problema jurídico, sino un problema social que sostiene un régimen injusto, que empobrece y hace sufrir a millones de españoles y españolas o habitantes de nuestro Estado.

El estado social, no existe todavía. Hemos de avanzar hacia él al objeto de construir en democracia el socialismo que garantice la equidad y la felicidad de las personas.

-Pero en el camino, exigimos el fin de la austeridad. La re-nacionalización de las eléctricas y empresas estratégicas de servicio público. La re-municipalización de servicios básicos, agua y recogida de residuos y limpieza así como la universalización de los servicios municipales. La autonomía municipal y la defensa de los municipios rurales, la agricultura junto a nuestro patrimonio forestal. No más olvido del municipalismo y del mundo rural.

-La República como forma más democrática de gobierno. Pero sobre todo como medida de freno a los poderes no electos democráticamente que son los que en el estado español gobiernan. Pero también como solución al problema del estado y al derecho de sus pueblos a federarse con libertad en él y ver respetados su cultura y derechos, de forma solidaria entre toda la clase trabajadora de España.

   -Planes urgentes e inmediatos contra la pobreza, el desempleo; las agresiones machistas; el precariado y la falta de derechos laborales. Justicia y reforma fiscal redistributiva y apoyo decidido a la cultura, la sanidad y la educación públicas.

Entendemos que estas líneas rojas. Todas ellas, marcan nuestra disposición a apoyar a quienes se comprometan a luchar por ello.

SOCIALISTAS desde su autonomía política, no concurriendo a este proceso electoral, si desea sin embargo, que la derecha sea arrojada del poder y no sea sustituida en él, ni por una nueva derecha, ni por quienes siempre nos acaban fallando por sus compromisos con el sistema y la oligarquía. Sino por la izquierda. Una izquierda real y consecuente. Sabemos las dificultades, pero estas no nos preocupan a las y los socialistas.