Critica que no haya dinero para políticas activas preventivas pero sí para despilfarrarlo en infraestructuras totalmente innecesarias como la playa de Santa Cruz de La Palma

SB-Noticias.- El psiquiatra palmero Félix González, que ha vivido los efectos del incendio en La Palma en primera persona, no tiene dudas de que uno de los grandes problemas que afectan a las islas viene dado por una dirigencia política anclada en un sistema desarrollista basado en las grandes infraestructuras y que ha olvidado las medidas preventivas en todos los campos, siendo la lucha contra incendios uno de ellos.

Hablamos de que no se está ejecutando una política preventiva en materia de incendios forestales, lo que hace que esos lugares que antaño estaban cultivados y que hoy están abandonados sean un peligro latente cada que vez que aumentan las temperaturas, afectando cada día con mayor peligrosidad a los entornos poblados, al menos en el caso de La Palma. “Ya ocurrió en 2009 y parece mentira que no se aprendiera de aquella situación angustiosa” aseveró.

La excusa de la falta de dinero de las administraciones podría valer a la hora de no aplicar políticas preventivas, pero llama la atención al hecho de que es más caro atacar la enfermedad (los incendios) cuando se produce, dicho lo cual critica que no haya dinero para esas políticas activas preventivas pero sí para despilfarrarlo en infraestructuras totalmente innecesarias como la playa de Santa Cruz de La Palma.

Desde su punto de vista, se podrían evitar grandes catástrofes en nuestros montes con una política agraria adecuada, con unas políticas de estímulo para que nuestros campesinos mantengan sus cultivos como antaño. “Yo no conozco a ningún agricultor que sea un depredador de la naturaleza, sin embargo sí los conozco metidos en el mundo de la política, sentenció el psiquiatra, quien ha vivido en primera persona el incendio de La Palma.

Félix González asegura que la gestión de los recursos públicos en relación a la lucha contra incendios es un factor totalmente influyente, luego cuanto menos dinero y menos medios, más posibilidades de que se produzcan catástrofes de esta índole en nuestras islas.

Mientras dicen que no hay dinero para nada, ni para mejores dotaciones contra incendios, ni para el sistema canario de salud, sin embargo se permiten el lujo de gastarse 23 millones de euros en una playa innecesaria, que además tendrá que enfrentarse a las duras pruebas que el mar que castiga con dureza la zona le ponga.

En este sentido, critica que el Gobierno estatal recorte partidas presupuestarias por todos lados, especialmente en la sanidad pública, pero sin embargo otorgue 2 millones para el emisario de esta playa capitalina, dicho lo cual considera una burla al pueblo las actuaciones de los políticos que nos gobiernan “quienes no nos están tratando ni como nos merecemos ni como nos corresponde por derecho”.

Aclara que no es que esté en contra de rehabilitar espacios para el disfrute de los ciudadanos, como es en este caso esa playa en Santa Cruz de La Palma, lo que ocurre es que en estos momentos de máxima urgencia social lo importante son las políticas esenciales como la sanidad, la educación o la asistencia social, porque cuando mejore la situación ya habrá tiempo para estas infraestructuras. “Este es tiempo de saber elegir y gastarse 23 millones de euros en un playa cuando la sanidad se desmorona es intolerable”, dijo.