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jueves, 25 de abril de 2024 09:47h.

Autovías o pistas de entendimiento PP-CC - por Nicolás Guerra Aguiar

Estimado lector, acabo de recibir un correo electrónico que me dejó perplejo en los primeros minutos: “Descubre la web que cambiará tu forma de conducir por la autopista”

Autovías o pistas de entendimiento PP-CC - por Nicolás Guerra Aguiar *

Estimado lector, acabo de recibir un correo electrónico que me dejó perplejo en los primeros minutos: “Descubre la web que cambiará tu forma de conducir por la autopista”.  Y como estaba leyendo en ese momento la noticia sobre la autovía entre Las Mesas y Arucas cuya obra se acaba de aprobar –Cabildo y Gobierno de Canarias-, y por aquello de que estamos en vísperas electorales, llegué a creer que su construcción se había realizado a la velocidad de la luz, 300 000 km por segundo: de ahí lo de “autopista”.

Y como sé que el entendimiento político entre PP-Canarias y CoATIción se llevó a una velocidad de dos años luz con vistas a las elecciones de 2015, mi estupefacción inicial fue mayúscula, pues habían logrado lo imposible: una autopista Arucas – Las Mesas en subdécimas de fracciones de segundo. Por tanto, el éxito estaba garantizado: los canarios votaríamos en masa a tal conjunción política capaz de hacer milagros. Y las cuatro personas de la foto son los paladines que suenan los claros clarines anunciadores de tal entendimiento, manos aliadas de pletóricos políticos satisfechos, ¡llegó la victoria! (Aunque, digo yo, ¿no debían ser cinco?)

Vuelvo, pues, al tiempo presente. Y me va a permitir, estimado lector, que lo invite a un juego tradicional: consiste en descubrir qué falta en el dibujo (en este caso, quién falta en la foto).  Sé que su sagacidad lo llevará de inmediato a la conclusión de que está racionalmente incompleta. Pero tampoco se le escapará a usted que, además, almacena en sus interiores de adentro mucho más que simples saludos, sonrisas, distensiones, corbatas, chaquetas y, en apariencia, apuntadas tripillas, fruto quizás de los sufrimientos que da la política, el ajetreo de aeropuertos, coches oficiales, almuerzos obligados sin el potajito casero, tan sabroso él con dos costillitas saladas. 

La imagen fue tomada el viernes de la semana anterior. Quienes aparecen en esta foto son, de izquierda –sin coña oculta, don Juan José- a derecha,  los señores Cardona (alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, del PP); Bravo de Laguna (presidente del Cabildo grancanario, del PP); Berriel (consejero de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, de CoATIción) y Sánchez (del PP, su correspondiente en el Cabildo). Celebran la firma del convenio.

Sin embargo, por aquello de “autovía Las Mesas – Arucas” (IV fase de la circunvalación), echo en falta a alguien. Pero, claro, ese alguien no forma parte del entendimiento político entre PP y CC cuyo proyecto es ambicioso: el acceso al poder tras las elecciones. Por tanto, en el Parlamento canario elevarán preces para deificar y glorificar al señor CClavijo (el hombre de ATI, aunque pepero, voz esta de recientísima inclusión en la 23ª edición del DLE). Con tal pacto la vicepresidencia del Gobierno canario corresponderá al PP (descartada la señora Montelongo por supuestas invitaciones, mi amigo el espía me dice que el señor Antona y la señora Navarro están en la quiniela). Y el reparto de consejerías dependerá de los votos obtenidos, algo así como el señor Rivero con los psocialistas, casi con identificación ideológica total (consonancia a la que, por supuesto, tienen legítimo derecho).  

De ahí la pregunta: ¿falta alguien en la foto, algún político que no es de la Conjunción PP-CC aunque, como el señor Cardona, es alcalde de un municipio y a quien, tal parece, se olvidaron de invitar o, quizás, consideraron no conveniente?  En efecto, lector: dejaron fuera al señor alcalde de Arucas, del PSOE.  O lo que es lo mismo, a un alto cargo del PSOE canario, partido que apoya al Gobierno de Canarias… y del que forma parte. Y al cual pertenece el señor Berriel, tan consejero como el señor Pérez García, psocialista y titular de Educación (y Vicepresidencia). ¡Menuda tomadura de pelo; qué desdén a la voluntad popular de la ciudadanía aruquense! (Pero, a la vez, ¡cómo posterga CC y desaira a su aliado, tan débil que es incapaz de elevar la voz no sea que lo destituyan por real decreto, identificado que está  con el poder!)

PP y CC escenifican en este acto la confirmación de los rumores que los señalaban como aliados para  ayuntamientos, cabildos y Parlamento canarios. Saben que ahora se la juegan, y que la única manera de aspirar al poder es su pacto nacional - nacionalista, aunque no sé qué ganará el señor Bravo de Laguna con una Coalición Canaria casi desaparecida en Gran Canaria. Y es que, además, la Isla resulta hoy feudo y señorío del señor Bravo quien mantiene enhiestas las ansias de seguir tal como ha manifestado en público (y, de paso, garantiza la continuidad del otro señor Bravo, filius). Sin embargo, tal como apuntan las apariencias y cuentan las sacristías, el señor presidente actual del Cabildo podrá tener problemas no solo para acercarse a los votos de 2011 sino, más peor, para ser candidato.

Pero el señor Bravo de Laguna (padre) ha demostrado que sabe latín. Ya se la jugó al señor Bañolas, a quien dejó en la estacada para realizar otro pacto que sustentaría sin peligro, y hasta el final de la legislatura, su omnímodo poder. Cierto es que lo consiguió, pues supo valorar las mezquinas ambiciones de alguien que jamás sospechó que podría acceder al cargo cabildicio de vicepresidente primero, aunque ya se sabe que para algunos pasajeros accesos se debe renunciar a los elementales principios éticos y estéticos, pero esta es la política que hay. Y a peor la mejoría, que dijo el filósofo, si la conciencia ciudadana no lo remedia.

Cuarta fase de la circunvalación, pues, que quieren presentar como un éxito del binomio PP – CC. Si los votantes mantienen candideces, ingenuidades, candores e inocencias, podrán impactar en mucha gente. Aunque a tenor de lo que leo (Canarias7) en opinión de lectores, la cosa ya no es tan sencilla: los votantes están hartos de oportunistas. Pero, claro: estamos en Canarias.

* Publicado con autorización del autor