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viernes, 29 de marzo de 2024 10:20h.

Aylan Kurdi, no ha muerto - por Olivier Herrera Marín

Que la inocencia renace avivando la conciencia solidaria de UE

Aylan Kurdi, no ha muerto - por Olivier Herrera Marín, Presidente de POETAP, Poetas de la Tierra y Amigos de la Poesía *

Que la inocencia renace avivando la conciencia solidaria de UE

Con apenas tres años cumplidos se nos ido Aylan para avivar nuestras conciencias al derribar con sus diminutos puños los muros de hormigón armado coronados con cuchillas y levantar con su último soplo de aliento las losas marmóreas que cubren las tumbas sin nombre de los inmensos cementerios bajo la luna en la ruta del viejo Mare Nostrum (la arteria aorta) que riega y alimenta el corazón de Europa desde las ardientes arenas y los vergeles del Próximo Oriente (cuna de la cultura) hasta las columnas de Hércules.

Ante la gélida imagen de un cuerpo diminuto y roto arrojado por las olas a una playa cualquiera, ante la víctima inocente de la gula irrefrenable y la desmedida codicia de todos los dioses blancos que han inventado el SISTEMA y rigen las inhumanas leyes de los mercados y de todas sus guerras sobran todas las palabras hueras, todas las promesas jamás cumplidas y los lutos oficiales de los mandatarios de turno.

Aylan es hoy el revulsivo que oprime el corazón y provoca la náusea de los ciudadanos de a pie dispuestos a exigir responsabilidades y pedir soluciones urgentes y reales a los políticos de quita y pon, a Rajoy, Cameron, la Merkel  y demás gurús y marineritos de agua dulce al servicio de la Troika  

Aylan nos ha dejado más pobres y huérfanos al irse en silencio y pedirnos ¡¡Ayudadme¡¡ a cumplir mi sueño de una vida mejor, de un mundo justo sin hambre y sin guerras donde impere la libertad universal y florezca el  amor fraternal.

Aylan, no ha muerto que vive y vivirá eternamente yendo más allá del espacio y del tiempo, al reencarnarse en el alma de todos y cada uno de vuestros hijos

Aylan nos pide por él y por los nuestros, que nos sobrepongamos a la congoja y el llanto para salir a la calle, ocupar las plazas públicas y tomar la palabra dando la medida de nuestra talla humana y solidaria.

Aylan, nos ruega que libremos la batalla política por los derechos humanos y los derechos de los niños en todos los frentes mediáticos y políticos, avivando las conciencias y tomando democráticamente en todos los foros, en los senados y en los parlamentos el espacio y las sillas que les corresponden y hay que cederles  a todos los niños, a los Santos Inocentes del mundo.

Olivier Herrera Marín

Presidente de POETAP

Poetas de la Tierra y Amigos de la Poesía

 

 

TOC-TOC LAS CARCELES

 

Amenazadas las fronteras del Norte

Por la explosión demográfica del Sur,

Por la emigración que se avecina

Y adivina imparable del Este.

 

Sin la necesaria tasa de natalidad

Para reproducirse biológicamente,

A la subespecie animal

Autoproclamada raza blanca.

 

A la cultura del saqueo y del despilfarro

Se le hunden sus valores y su mundo,

Se le hunden las bolsas y las bases,

Los pilares y cimientos de su poder.

 

A los blancos caníbales y antropófagos

De los suyos y de sí mismos,

Les tiemblan las patas y las manos

Cuando oyen el Toc-Toc en sus puertas.

 

Se desesperan, aterrados,

Por la ola de criminalidad

E inseguridad ciudadana

Que les acosa y les azota.

 

Chicago, años veinte y la ley seca,

Al Capone y Los Intocables,

Historietas y cuentos para dormir

Hoy los niñitos de biberón.

 

A los de la doble y triple moral,

Que siembran el hambre y la guerra,

Les tiembla la voz del alma

Cuando alguien les pide su pan.

 

En los EE.UU. y en la UE los blancos

Se sienten machos y seguros de sí mismos,

Ricos y ufanos, van bailando y silbando,

Marcando, pisando fuerte en el asfalto.

 

Y cuando se les acerca un negro o un moreno,

Un indio o un amarillo que no sea japonés,

Dan un salto y retroceden espantados,

Huyen como perseguidos por el diablo.

 

Despavoridos de sus propios pecados.

Cierran las puertas blindadas

De sus corazones y de sus almas

Con mil cadenas y candados.

 

Se esconden detrás de los cerrojos,

Debajo de las camas y en los armarios,

En los sótanos y refugios

De plomo y de hormigón armado.

 

Se encierran y se encadenan

Los de la miserable opulencia,

En las cárceles del cuerpo y del alma,

De su angustia, su tortura y locura.

 

                                                                                                  Enero del 1991

 

                                                                                                          Publicado en Dioses Cínico

 (Presidentes, Ministros y Generales) el año 1994

 

* En La casa de mi tía por gentileza de Olivier Herrera Marín