El buen ejemplo de Zaida Cantera - por Antonio Aguado, veterano militante socialista *

Hasta que su caso no salió a la opinión pública, Zaida Cantera era una más de tantas mujeres que en nuestro país son acosadas sexualmente, pero gracias a la lucha ejemplar que emprendió en defensa de su integridad y dignidad, pudimos enterarnos de lo que se sospechaba con relación al estamento militar, que dotado con estructuras férreas y encorsetadas posibilita que esto suceda.

Zaida Cantera hizo algo muy encomiable, como fue extender sus reivindicaciones al resto de las anónimas mujeres militares que vienen padeciendo lo mismo. Eso sería motivo más que suficiente para que el funcionamiento del ejercito se revisara y adaptara a los nuevos tiempos que vivimos. Por supuesto, que ha llegado a ser peor y de alguna forma la vida militar, con relación a tiempos pasados afortunadamente superados ha mejorado, comprobándose entre otras cosas, con la propia incorporación de la mujer a las fuerzas armadas, pero las mejoras no han sido suficientes.

En consecuencia, va siendo hora de no “seguir mirando para otro lado”, abordando y poniendo en práctica las reformas que se estimen convenientes y necesarias para mejorar éste sector tan importante de la sociedad y así, evitar casos como el padecido por Zaida Cantera y de producirse, se puedan adoptar las medidas correctoras necesarias, contra quienes abusando de su superioridad jerárquica, tengan éste tipo de comportamientos deleznables.

Siendo una mujer joven, preparada e identificada con su profesión, tuvo que abandonar la carrera militar con el grado de comandante y es que al acoso sexual, se le unió el laboral mediante una persecución orquestada, que le ejercieron otros mandos militares, que hicieron causa común con el acosador sexual, por haber sido condenado en sentencia sin precedentes por un tribunal militar y ratificada por el Tribunal Supremo. Desde la impotencia tuvo que soportar como su acosador fue ascendido en su escalafón jerárquico de teniente coronel a coronel. Ascenso que contó con el beneplácito del ministro de Defensa Pedro Morenés.

Contó Zaida con la inestimable ayuda de Irene Lozano que como diputada de UPyD (Unión Progreso y Democracia), siempre estuvo a su lado apoyándola en sus justas reivindicaciones. Igualmente la Sociedad nada más conocer su caso fue sensible y le mostró solidaridad y apoyo.

Pedro Sánchez como secretario general del PSOE y candidato a la presidencia del gobierno en las elecciones de diciembre de 2015, le ofreció la oportunidad de ir en su candidatura por Madrid. Zaida Cantera aceptó en la seguridad de que era una oportunidad para que utilizando la plataforma del Parlamento, se pudiera escuchar mas y mejor su voz a favor de las mujeres maltratadas.

Su llegada al  PSOE no se produjo en el momento más adecuado y oportuno. El Partido Socialista viene padeciendo una crisis de incalculables consecuencias, desde las elecciones de noviembre de 2011 y su declive ha ido en aumento desde entonces, tal y como se ha demostrado en las sucesivas elecciones, como consecuencia de “haber tirado por la borda” muchos de sus principios y convicciones y salirle en Podemos un potente competidor.

Todo se ha agravado, desde que se produjo la bochornosa reunión del Comité Federal del PSOE del 1 de octubre, en la que de forma burda y miserable obligaron a que Pedro Sánchez tuviera que dimitir, habiéndose comprobado que al margen de cualquier otra consideración, existía la lucha por el control y el poder del Partido. El remate se materializó el 23 de éste mismo mes, cuando en otra reunión el Comité Federal, decidió que el Grupo Socialista en el Congreso, se abstuviera en la segunda sesión para facilitar la investidura a la presidencia del gobierno de Mariano Rajoy. Como no se especificó el número de diputados que tendrían que abstenerse, para que se pudiera materializar la mencionada decisión (numéricamente podría ser a partir de 11), la “marioneta” Comisión Gestora elegida (impuesta por Susana Díaz y sus acólitos), decidió “unilateralmente” (previa consulta a la gran baronesa) que el voto afirmativo por la abstención del grupo parlamentario debía ser en bloque, esto es de los 84 diputados, sin contemplar bajo ninguna circunstancia ningún voto negativo, como podría ser el de los socialistas catalanes, tampoco los individuales que aún alegando problemas de conciencia vayan en el mismo sentido.

Pero en el caso de Zaida Cantera como diputada del grupo socialista las connotaciones son diferentes, ya que ella se presentó como independiente, lo mismo que la jueza Margarita Robles. Ambas han manifestado su disposición a votar negativamente la investidura de Rajoy en las dos sesiones y lo hacen acogiéndose al compromiso adquirido ante el electorado, que se contempla en el programa electoral del PSOE y el mensaje claro y contundente de ser la alternativa a Rajoy y al reaccionario y corrupto Partido Popular, a quienes por activa y pasiva no se iba a apoyar.

Las dos han dejado claro que el cambio de sus votos negativos por la abstención, aparte de provocarles un problema de conciencia, no sería comprendido por la ciudadanía a la que se deben y que con toda seguridad, ese inexplicable giro, provocará un mayor distanciamiento del PSOE con su electorado. El Comité Federal es el órgano (elitista) máximo entre congresos en el Partido Socialista. Tiene un gran déficit democrático y es que sus miembros salvo honrosas excepciones, son elegidos (impuestos), por los barones regionales en listas cerradas, de ahí, sus nefastas y destructivas decisiones.

Si Pedro Sánchez no dimite y vota negativamente la investidura, la crisis se agravará (aclarará y podría ser positivo) mucho más y para represaliarle a él, tendrían que hacerlo con el resto de diputados que igualmente votaran no, pero si presenta su dimisión (espero que no lo haga y por supuesto vote no a la investidura), lo más probable, es que no se produzca drásticas represalias contra los diputados díscolos, pero Susana Díaz y compañía, lo tendrán en cuenta y no repetirán como candidatos en nuevas elecciones. Sería una lastima que eso ocurriera con Zaida Cantero y Margarita Robles, personas integras y coherentes necesarias para regenerar la denostada política.

* En La casa de mi tía por gentileza de Antonio Aguado Suárez