Fuerte mediatización, mucha provocación, y nos resignamos
En Búsqueda del discurso robado - por Carlos Ortiz de Zárate
En Búsqueda del discurso robado - por Carlos Ortiz de Zárate *
Este viernes Casa Real ha hecho dos discursos que nos roban el pensamiento. Por una parte no considera oportuno el regreso del Emérito. Por otra, incluye al “inoportuno en las felicitaciones de Navidad.
“El País” lo ha sacado en la edición matinal del viernes: “La Casa del Rey considera prematuro el regreso de Juan Carlos I en Navidad”:
“Conocidos de Juan Carlos I le animan a regresar este mes aún en contra de la opinión de La Zarzuela y La Moncloa”
El mismo medio nos anuncia a lo largo del día: “La familia real felicita las fiestas con una tarjeta que incluye la firma de don Juan Carlos junto a la de doña Sofía”:
¿Es posible razonar? Hay otras noticias que nos impactan; imposible pensar cuando la Covid sigue matando o ABC y la Sexta, entre otros medios, nos recuerdan a ETA
El primero ofrece dos artículos que nos hacen temblar y crujir de dientes:
“La Audiencia adelanta la libertad del etarra «Pakito» en el aniversario del atentado de la casa cuartel de Zaragoza”:
“La AVT denuncia el plan de falsos arrepentimientos de los presos etarras el día que se nanuncian otros 6 traslados”:
Este sábado, el Emérito y la Covid siguen dominando las portadas. He encontrado un artículo que asusta aún más, en Público: “Podemos acusa a Justicia y Economía de maniobrar para proteger los intereses de los fondos buitre en los desahucios”:
Los de Pablo Iglesias denuncian que los ministerios dirigidos por Juan Carlos Campo y Nadia Calviño están retrasando la aprobación del decreto que servirá para ampliar la prohibición de los desahucios. Justicia y Economía estarían planteando abonar con dinero público a los grandes tenedores de vivienda el 100% del alquiler derivado de la paralización de los desahucios.
Fuerte mediatización, mucha provocación, y nos resignamos. No habrá reforma laboral, la corrupción campa a sus anchas ¡Y se salen con la suya!
Bueno, aquí estamos, intentándolo. El discurso del poder es terriblemente invasor. Somos un granito de arena, pero, si echamos los miedos y la imposición veremos que somos los suficientes para desinflar ese discurso que nos aplasta y que podemos recuperar la voz, que la tenemos.
* La casa de mi tía agradece la gentileza de Carlos Ortiz de Zárate
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