“El carnaval y la memoria histórica" - por Ramón Armando León Rodríguez *

El carnaval es una de las fiestas más antiguas; y muy difícil de erradicar. La dictadura franquista lo prohibió, pero en algunos pueblos de Canarias se celebraba, saltándose la prohibición.

No soy carnavalero, pero, si lo prohibió el franquismo, no puede ser malo.

Digo esto a raíz de algunos comentarios que he leído en FB. Es cierto que muchos políticos son más proclives a invertir dinero en estas fiestas que a emplearlo, como dice un amigo, en abrir las fosas del cementerio de Vegueta (Las Palmas de Gran Canaria), donde están sepultados los republicanos fusilados por los fascistas de Franco.

Hay que entender dos cosas: abrir las fosas no da votos y no aportar dinero, por parte de las administraciones, para la fiesta del carnaval sí resta votos.

El carnaval mueve a miles de personas y el tema de la memoria histórica sólo mueve a personas con conciencia, y son muy pocas.

Dicho esto, no creo que la fiesta del carnaval sea la culpable de la desidia de los políticos responsables para acometer con valentía la apertura de las fosas del cementerio de Vegueta. Se sabe que no es fácil abrir dicha fosas, porque requiere la autorización del Ayuntamiento, y el consistorio ha solicitado informes de técnicos especializados que han resultado contradictorios.

El Cabildo de Gran Canaria intentó llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento para la posible apertura de las tumbas, pero fue inútil.

Ahora toca esperar.

…¿O no?

* Del muro en FACEBOOK de Ramón Armando León Rodríguez