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jueves, 25 de abril de 2024 09:47h.

Concordancia con Víctor Ramírez - por Isidro Santana León

Advertía mi amigo Víctor Ramírez en el Diario de Las Palmas hace 16 años… "El aviso a los independentistas oficiales"

Concordancia con Víctor Ramírez - por Isidro Santana León

Advertía mi amigo Víctor Ramírez en el Diario de Las Palmas hace 16 años… "El aviso a los independentistas oficiales"

Son ya bastantes las personas que me lo han señalado, y el asunto preocupa y desconcierta. Ya sabemos que casi todos los canarios -a poco que rasques un poco el barniz seudocultural con que se "protegen"- se sienten, en el fondo, independentistas.

Por eso me ha dolido eso que me han dicho de los independentistas oficiales, principalmente de quienes encabezan partidos u organizaciones. Y tienes, compay Ramírez, que avisarles con urgencia; tienes que ponerles sobre las ascuas de la reflexión sincera. Muchos de ellos son queridos camaradas tuyos.

Pues, después de enterarnos de cuán tantísimo dinero y de cómo dedica el Poder metropolitano los llamados "fondos reservados", pueden dar ellos -los independentistas oficiales- la impresión de que están siendo dirigidos o manipulados o al servicio de la policía política española. Tiene esto su lógica aplastante.

Por favor, habla con ellos. Acaso aún estemos a tiempo. Sé que te costará mucho decírselo, que probablemente no te atreverás: porque temes que su soberbia, su orgullo o su amor propio haga que se te enfaden, que corten la amistad contigo.

No obstante debes decírselo, sin tapujos, con cariño: "estamos dando la impresión, nos estamos comportando como si sirviéramos al poder metropolitano" -así de sencillo.

Te resultará duro escuchar de mis labios esto. También a mí me lo resulta el haberlo oído y tener que decírtelo. Mas, si no te lo digo, me consideraría un traidor. Y, como tú, yo también aborrezco la ingratitud y la traición, amigo Ramírez. Así que habla urgentemente con ellos.

 

18-abril-1994

Hoy, escribo yo, Isidro Santana, mientras atisbo, analizo, vivo y constato que, lo que advertía Víctor en el año 1994, finalmente se ha consolidado y materializado sus indicaciones, de forma que el pensamiento, la consciencia, la formación y la militancia activa de las nuevas generaciones independentista son vacuas o estériles en cuanto al avance de nuestra soberanía, mas, por el contrario, la regresión hacia el desconocimiento y la distorsión de la realidad ha hecho un mal irremediable en ellos, quienes tenían que tomar el relevo e incidir sobre nuestro pueblo y su organización. Exactamente, es muy sospechoso que muchos de aquellos antiguos dirigentes o personas de incidencia social en el campo nacional, se hayan fosilizado como caudillos dentro de sus grupúsculos, sin la más mínima voluntad, esfuerzo y humildad para lograr la convergencia nacional mediante la imprescindible unidad, anteponiendo sus intereses privados y megalómanos a los de nuestra descompuesta, malhadada y, cuasi, irremediable patria.

El mal no sólo ha incidido directamente en la estructuración de un verdadero independentismo en Canarias –de ahí se  nutren estos individuos con intereses espurios dentro del soberanismo–, sino que su complicidad con el sistema colonialista español ha hecho que nuestra juventud no alcance el grado óptimo de conciencia para tomar las riendas de nuestro gran problema colonial, sino que, además, la han imbuido, envilecido y retenido, de forma engañosa  –a sabiendas de que son ellos el motor de todo movimiento social y político para cambiar la sociedad–,  en una vorágine que les desvía y despista de la realidad colonial existente, encausándolos en el folklorismo más ignominioso e insustancial dispuesto para la perpetuación colonial  –únicas actividades “políticas” existentes–, así como el adoctrinamiento para convertirles en acólitos de taifas y sustentar las microestructuras de los caudillos. No quiero soslayar, que si bien no hay constancia documental de que la policía española subvenciona directamente a los dinosaurios que continúan anclados en las posturas inmovilistas para que nada se mueva, sí que estará muy desahogada en su labor de control y persecución política, ya que la quinta columna viene trabajando, hace muchos años, con dedicación y entusiasmo. No obstante, le tengo que dar la razón a mi compatriota Víctor: a poco que señalas dónde está el tumor, te atacan, calumnian y por traidor te dejan ante lo público, aquellos que manejan los hilos en un independentismo colaborador que yo le llamo colonialismo endógeno. Sí, es necesario leer a Víctor, quien nunca ha dejado de ser independentista, sino que, como él me dice, ha tenido que apartarse y buscar la soledad solidaria para no intoxicarse con tanto virus y bacterias que subrepticiamente se mueven en la colonia pudriéndolo todo, y lo que yo tampoco les perdono nunca, es que hayan manipulado de una forma sutil y perversa a nuestra juventud, dejándola en medio del océano sin una brújula y en una noche oscura donde no pueden divisar algún astro que les referencie en qué lugar se sitúan.

* En La casa de mi tía por gentileza de Isidro Santana León