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jueves, 28 de marzo de 2024 09:57h.

El desvarío ideológico de Pablo Iglesias y Podemos.- por Antonio Aguado

ANTONIO AGUADO 350La indefinición o ambigüedad ideológica calculada, le ha venido dando buenos resultados de forma generalizada a Podemos y en lo personal a Pablo Iglesias como líder de ésta formación. En el primer caso se podría comprender debido a que Podemos es una coalición política nueva y heterogénea, compuesta de varias organizaciones territoriales y todavía en proceso de adaptación, aunque recientemente Pablo Iglesias desde su indiscutido y férreo liderazgo, le ha impuesto un (¿su?) ideario: el socialdemócrata.

 

El desvarío ideológico de Pablo Iglesias y Podemos.- por Antonio Aguado *

 

La indefinición o ambigüedad ideológica calculada, le ha venido dando buenos resultados de forma generalizada a Podemos y en lo personal a Pablo Iglesias como líder de ésta formación. En el primer caso se podría comprender debido a que Podemos es una coalición política nueva y heterogénea, compuesta de varias organizaciones territoriales y todavía en proceso de adaptación, aunque recientemente Pablo Iglesias desde su indiscutido y férreo liderazgo, le ha impuesto un (¿su?) ideario: el socialdemócrata.

La definición ideológica de Podemos en su conjunto se hace muy difícil, no solamente por la complejidad de su composición con tantas siglas, también en lo que éstas se identifican y representan. Pero no debería ser así con relación a Pablo Iglesias, pues el sentimiento ideológico es personal e intransferible y en su caso, se debe entender que desde que empezó a participar en la política, sus ideas, principios y convicciones las debería tener claras, máxime en una persona ilustrada como él.

Los “bandazos” o calculada ambigüedad ideológica de Podemos, se puso de manifiesto al exponer que ellos no se identificaban, ni tampoco iban a entrar y menos participar en el “juego o distracción” de los enfrentamientos entre la derecha y la izquierda y utilizando un nuevo lenguaje político, pretendían desde la transversalidad representar a los de abajo, contra los de arriba.

La coherencia en la política suele “brillar por su ausencia” y el paso de una ideología a otra es bastante frecuente, siendo la mayoría de las veces por intereses personales, fundamentalmente para perpetuarse en los cargos y como profesional (casta) vivir de la política. Éste no es el caso (al menos por ahora) de Pablo Iglesias, pero si lo es ateniéndonos a su origen comunista en lo relacionado a su incoherencia, después de haber manifestado recientemente considerarse socialdemócrata.

Si fuera comunista español, me sentiría profundamente orgulloso de pertenecer a una organización política que ha sido fundamental en el devenir y la Historia de España. Sus esfuerzos y sacrificios han sido constantes, habiendo contribuido a mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y a cohesionarnos como ciudadanos y pueblo. Los ejemplos más relevantes y evidentes fueron los protagonizados durante la Guerra Civil, anteponiendo los derechos e intereses de la II República, a los suyos propios, algo muy diferente a lo protagonizado por las demás fuerzas políticas integradas en el Frente Popular, hasta el punto de que Juan Negrín, nada sospechoso de ser comunista (como interesadamente le acusaban los franquistas), viendo su responsabilidad, lealtad y disciplina les incorporó al gobierno.

Lo mismo pasó en la época de la clandestinidad durante el franquismo, habiéndose significado como los máximos opositores a ese dictatorial, nefasto e injusto régimen y en la etapa de la Transición, aunque “comunistas de salón” que pasaron posteriormente a ocupar su natural status de burgueses,  criticaron el proceso y la participación del Partido Comunista, pero no habiendo alternativas posibles, su compromiso fue determinante y dieron ejemplo de responsabilidad acordando y cediendo algunos de sus postulados, en aras de traer y arraigar la libertad y la democracia a nuestro país.

De cara a las elecciones de éste domingo 26-J, la conservadora derecha representada por el Partido Popular y Ciudadanos, ha venido intensificando y recrudeciendo sus criticas, insulsas y sin fundamentos a Podemos.

Grandes jerarcas “socialistas” y algunos barones regionales (incluida la “gran baronesa”), se han identificado y participado de esas críticas. Son los mismos que han propiciado la perdida de sensibilidad social del Partido Socialista y su falta de compromiso, no haciendo los deberes que como socialistas les eran inherentes. Secuestrando al PSOE desde las instituciones y haciéndole perder gran parte de sus valores y principios, tienen la responsabilidad del nacimiento y arraigo de Podemos y ahora hipócritamente están en su contra, poniendo en manifiesto lo que bien describe la frase: “a conejo ido, palos a la madriguera”.   

Sin ejercer la autocrítica, pretenden conseguir el rechazo hacia Podemos, mediante la psicosis del miedo a través de acusaciones descalificatorias. Una de las que más utilizan es que son unos peligrosos radicales comunistas y que en caso de gobernar hundirían a España. El Partido Popular no reconoce, que han sido ellos quienes durante los cuatros años de gobierno y los seis meses en funciones, han originado peligro de subsistencia en gran parte de la clase media y trabajadora y nos han llevado a situaciones de injusticia y desesperanza extremas.

El PP como partido político ultraconservador ha venido demostrando falta de sensibilidad hacia los más humildes y desfavorecidos y no es de recibo las acusaciones falsas y negativas dirigidas a Podemos de ser peligrosos comunistas, obviando que acoge en su seno a muchos radicales ultraconservadores y fascistas.

Aparte de no entenderse sus contradicciones y retrocesos reivindicativos, inexplicablemente, Podemos en general y Pablo Iglesias en particular no han salido a la opinión pública para rebatir esas infames acusaciones y dejar claro el carácter ultraconservador y reaccionario del Partido Popular. La impresión que se desprende es que tienen temor sobre todo electoral, acerca de que a varios de sus dirigentes se les reconozca sus pasados comunistas y que esto pueda afectarles negativamente. La condición ideológica con arreglo a valores, principios y convicciones, se adquiere y defiende libremente, en éste caso la honrosa comunista.

ANTONIO AGUADO 350

 

* En La casa de mi tía por gebtileza de Antonio Aguado Suárez