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viernes, 19 de abril de 2024 00:09h.

Miedo y asco: - por Alejandro Gómez Vázquez

La revista satírica Hermano Lobo publicó en agosto de 1975 una portada en la que se veía a un político en un estrado que parecía estar dando un discurso. El líder decía: “¡O nosotros o el caos!”, Y el público contestaba: “¡El caos el caos!”. A lo que el líder respondía: “Es igual, también somos nosotros”.

Miedo y asco: - por Alejandro Gómez Vázquez *

La revista satírica Hermano Lobo publicó en agosto de 1975 una portada en la que se veía a un político en un estrado que parecía estar dando un discurso. El líder decía: “¡O nosotros o el caos!”, Y el público contestaba: “¡El caos el caos!”. A lo que el líder respondía: “Es igual, también somos nosotros”. Esta imagen que pretendía criticar el discurso del miedo que caracterizaba el franquismo es perfectamente aplicable 40 años gracias al gobierno del Partido Popular. A día de hoy, gracias al continuo discurso del PP afirmando que cualquier posibilidad en el gobierno ajena a ellos nos va a llevar al corralito, a la ruina (en la que de todos modos ya estamos)… Gracias a esto han conseguido “no parecer tan malos”. De todo lo malo que ha ocurrido durante esta legislatura, han logrado sacar un pequeño detalle que han utilizado como un reclamo para quitarle importancia a cualquier problema.

No es el único modo de asustar que ha utilizado el gobierno, su mejor éxito ha sido la Ley Mordaza. Esta ley ha intentado callar las protestas de distintas formas, quiere crear miedo a cualquier forma de protesta contra el régimen. Así, criticar la corona o protestar un desahucio e incluso grabar a un policía agrediendo a alguien se convierte en delito mientras que todos los allegados al gobierno salen impunes de todo aquello que roban. Han conseguido utilizar el miedo como arma y que sus votantes ni siquiera se den cuenta, llegando a liderar de nuevo las encuestas de cara a las elecciones generales. Se han dado cuenta de que el miedo es la forma más efectiva para dirigir a una parte de la población indecisa.

Sin embargo, han visto que hay un grupo de población rebelde que rechaza esta política y lucha por recuperar su libertad. Con cada artista detenido o político encarcelado por pertenecer a determinados partidos políticos solo consiguen que cada vez más gente se una a la rebeldía. La música es un método de lucha para denunciar las injusticias, y por ello se encargan de tachar de terrorista a cualquier artista comprometido.

Si hay que definir esta legislatura con una palabra sería miedo: miedo al desempleo, miedo a un desahucio, miedo a la pobreza, miedo a la censura, miedo a las detenciones arbitrarias, miedo a criticar una monarquía elegida a dedo, miedo a manifestarse y las represalias policiales, miedo a luchar por nuestros derechos.

 

* En La casa de mi tía por gentileza del autor