¿Es necesaria la metroguagua? - por Antonio Aguado Suárez, coherente veterano militante socialista *

Vaya por delante, que soy un firme partidario y defensor del transporte público, y que creo que hay que arbitrar todas las medidas posibles para mejorar el existente en nuestro municipio de Las Palmas de Gran Canaria. Un transporte público que, aun habiendo últimamente evolucionado favorablemente, todavía tiene graves deficiencias, que se deben corregir con la  participación de la ciudadanía, bien sea ésta a titulo particular o colectiva, por mediación de las diversas organizaciones cívicas arraigadas en nuestro municipio, que seguro podrían aportar información valiosa, acerca del proyecto que se pretende implantar   

¿Este proyecto es necesario?. ¿Es viable?. ¿Es socialmente rentable?.¿Solucionará los problemas de circulación de la ciudad?. ¿Por su elevado presupuesto, no hay otras alternativas?. ¿Existe un proyecto claro y bien definido?. Si es así…… ¿Por qué no se somete a la consideración de los ciudadanos?. ¿Será útil y no como tantos otros un mega ególatra proyecto?.

Como ciudadano del municipio de Las Palmas de Gran Canaria y contribuyente, quiero manifestar que a lo mejor podría estar de acuerdo en éste hiper proyecto, pero al tener dudas, estoy en mi derecho a que por los responsables pertinentes me sean contestadas.

Me imagino que el impresentable e indecente Carlos Fabra, cuando siendo presidente de la Diputación de Castellón, se empeñó y consiguió construir un innecesario e inservible aeropuerto, ante los ciudadanos haría una “campaña informativa” (propaganda), para seducir a los castellonenses, sobre la conveniencia y necesidad del proyecto y con toda probabilidad “cayeron en el señuelo” y sin la información necesaria le darían su respaldo y aprobación.

La parte baja de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria es alargada y, tomando como referencia la Avenida Marítima y las calles por donde discurre la línea 2 (Pío XII, Tomás Morales etc.), es estrecha, lo que significa que centrando la movilidad por las vías que atraviesan esas referidas zonas, el desplazamiento del viajero, ahora como peatón desde la parada donde se apea hasta el lugar que motiva su desplazamiento no es considerable y en consecuencia, con una nueva flota de guaguas que podría hacerse extensiva para cubrir el transporte del resto de la ciudad (la situación en los barrios y la Ciudad Alta, es tanto o más grave), con un coste mucho menor de los 150 millones de euros previsto para éste proyecto, se podría adquirir las guaguas necesarias que puedan cubrir de forma optima (prontitud o agilidad, comodidad y precios económicos o gratuitos si la situación social y económica del viajero lo requiere) el transporte público en todo el municipio.  

En su momento una información que nos facilitaban, tratando de convencernos con éste proyecto es que su frecuencia sería de cada 5 minutos, significa que si como parece su capacidad es de 200 (o más), viajeros, con las referidas frecuencias y capacidad podría ocurrir que falten vecinos (sobre todo porque solo abarca  la parte baja del municipio, o sea el 33 por ciento de la demanda), para cubrir las plazas ofertadas y disponibles.

Es mucho dinero que se pretende invertir, sin que al margen de los políticos que como suele ocurrir si lo tienen claro, a nosotros los ciudadanos nos pidan no contando con la suficiente y necesaria información  “un cheque en blanco”, habiéndose quedado sólo en una promesa la mayor transparencia y participación ciudadana en la gestión municipal.

Si no demuestran la necesidad y prioridad de éste proyecto, su presupuesto sería mucho más útil y socialmente rentable, para cubrir otras necesidades más graves e importantes como los servicios socio-sanitarios, culturales y las tan demandadas escuelas infantiles, que afectan muy directamente a grandes capas de la población sobre todo de barrios humildes y deprimidos.

En ese sentido, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria por estar en su municipio, debería solicitar al Cabildo (es absurdo que ésta institución intermedia tenga éstas competencias y como servicios directos, no sean transferidos a los ayuntamientos, como institución más cercana a los ciudadanos), que le ceda la antigua Casa del Niño, que lleva más de 30 años cerrada y abandonada, pero reúne unas magnificas posibilidades y ésta bien situada en una zona muy poblada (El Cono Sur), que tiene necesidad de esos referidos servicios. Lo mismo ocurre con la antigua Facultad de Medicina que lleva también muchos años cerrada y abandonada y el antiguo Internado San Antonio muy infrautilizado, igualmente perteneciente al Cabildo.

En fin, si logran convencer que con independencia de un proyecto integral de transporte publico municipal para toda la ciudad, el de la metroguagua es necesario y prioritario, no tendría que haber  ningún reparo (todo lo contrario) para apoyarlo, de lo contrario hay otras necesidades más graves e importantes que se deberían prioritariamente y con urgencia cubrir. 

* En La casa de mi tía por gentileza de Antonio Aguado Suárez