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viernes, 29 de marzo de 2024 00:12h.

No me gusta la ciudad en donde vivo - por Eloy Cuadra

 

ELOY CUADRAAquí hay personas que duermen en cajeros, en soportales, en barrancos, o en un triste banco de los de sentarse, y eso tampoco me gusta, no me gusta verlos así, y menos me gusta la indiferencia de la gente, que es también mi indiferencia, son ya parte del mobiliario. 

No me gusta la ciudad en donde vivo - por Eloy Cuadra *

Hay muchos coches, y están por todos lados, circulando o aparcados, en garajes de cuatro plantas y en doble fila, se ve que aparcar es muy complicado en esta ciudad. Aunque, creo que no es cosa exclusiva.

Pero no, no me gusta la ciudad donde vivo, hay mucho ruido, demasiadas sensaciones juntas para mis sentidos de pueblo, no, no me gusta.

No me gustan las calles, llenas de chicles pegados al suelo, y mierdas de perro, también pegadas, a veces, a mi zapato descuidado.

No, no me gusta la ciudad donde vivo, hay mucha gente, caminan muy rápido, y casi nunca te miran a los ojos, se ve que llevan prisa, o no se fían. Tal vez tengo cara de sospechoso de algo, por eso se muestran así de esquivos, o quizá son cosas de todas las ciudades.

También es cierto, no es fácil mirarte a los ojos y atender al móvil al mismo tiempo. Y en la ciudad donde vivo la mayoría de la gente esta ocupada con ese aparato imprescindible.

No, no me gusta, quizá porque aquí la mayoría de las personas son sobre todo eso, gente, sujetos anónimos a los que nunca llegaré a conocer, de la mayoría, ni tan siquiera su nombre.

No, no me gusta la ciudad donde vivo, donde el horizonte que mi vista enfrenta casi siempre es un edificio gris.

Aquí hay personas que duermen en cajeros, en soportales, en barrancos, o en un triste banco de los de sentarse, y eso tampoco me gusta, no me gusta verlos así, y menos me gusta la indiferencia de la gente, que es también mi indiferencia, son ya parte del mobiliario.

Ellas tampoco suelen mirarme.

Algunas, dejan de estar al cabo de un tiempo, me dicen que se han muerto, o se los llevaron, aunque me gusta pensar que decidieron salir de la calle, o los recogió un hermano, o encontraron trabajo, creo que me engaño, pero me gusta pensarlo.

También me gusta pensar que en cualquier momento, así cuando lo desee, puedo escapar de la ciudad donde vivo.

Pero, no sé si también, esta vez, otra vez, me engaño.

* Del muro en FACEBOOK de Eloy Cuadra

eloy cuadra