No puedo comer en Cáritas porque no estoy en la lista" - por Ramón Armando León Rodríguez *

Hoy me senté a coger un poco de resuello, debido a las altas temperaturas, en un banco de Las Canteras y a los pocos minutos se sentó cerca de mí una señora o señorita de unos cuarenta años escuchando música con unos auriculares a través del móvil.

Hasta aquí todo me pareció normal, pero al poco rato apareció otra mujer bastante deteriorada e iniciaron una conversación:

-¿Cómo estás? Le preguntó la mujer de los auriculares -Bastante mal -le respondió la otra- estaba yendo a comer a Cáritas pero ahora no puedo ir porque no estoy en la lista.

-¿Y dónde estás comiendo? -Me busco la vida por ahí y con lo que me dan me compro un bocadillo y una coca cola -¿Y dónde duermes? -Le interrogó de nuevo- duermo en la calle, contestó y le indico una zona a las afueras de la ciudad. -¿Tú familia no te ayuda? -Nunca les he pedido ayuda, además tengo dos hermanos que están enganchados a la droga y si vuelvo a mi casa puedo recaer y yo quiero salir de ese mundo. -¿Tú compañero dónde está? -Se está bañando -¿En la playa? -No, en el balneario, siempre nos duchamos en él, nos gusta estar limpios, contestó con orgullo y se despidió de la otra mujer sonriendo.

Me dio la sensación de que la mujer de los auriculares era trabajadora social o enfermera y que se conocían desde hacía bastante tiempo, pero que las circunstancias las llevaron a formas de vida diferentes.

Yo me marché, ella siguió sentada oyendo su música y no sé si la otra mujer consiguió que le dieran de comer en Cáritas.

Lo cierto es, que fue un “momento dramático”.

Desgraciadamente hay muchísimas personas en la misma situación que está mujer, unas por culpa de la droga y otras porque no tienen trabajo, en ambos casos “el máximo culpable es el gobierno”.

…¿O no?

* Del muro de FACEBOOK de Ramón Armando León Rodríguez