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jueves, 25 de abril de 2024 15:48h.

Oportunismo ciudadanista contra la izquierda en La Orotava - por Samuel González

El vacío que van a dejar en las próximas convocatorias electorales PP, CC y PSOE se ha transformado en el pistotelazo de salida para alimentar nuevas ambiciones políticas, que ofrecen caras nuevas para que nada cambie.

Oportunismo ciudadanista contra la izquierda en La Orotava - por Samuel González, profesor de matemáticas *

 El vacío que van a dejar en las próximas convocatorias electorales PP, CC y PSOE se ha transformado en el pistotelazo de salida para alimentar nuevas ambiciones políticas, que ofrecen caras nuevas para que nada cambie. Personas que han estado apoyando las políticas, los políticos y los partidos culpables de la crisis se autoproponen como verdadero pueblo, como ciudadanía revelada, y, además, tienen la desvergüenza de pedir, a las formaciones políticas que han luchado durante años contra las políticas neoliberales, que se disuelvan y se retiren ante su deslumbrante solución para los problemas de la gente: quitar a otros y ponerse ellos.

 El portavoz de una iniciativa “ciudadana” para La Orotava, Raúl González Suárez, se dirigió la semana pasada a los partidos del municipio, que han luchado durante años contra la corrupción y en defensa del medioambiente y las políticas sociales, particularmente a IpO, IUC y SSP, para pedirles que le apoyen y “que no se presenten a las elecciones”. Raúl González declara que “se requiere gente con una mentalidad nueva y fresca para una nueva política”. Dejando de lado la doble acepción de “fresca”, hay que suponer que él es una de esas personas que encarna la verdadera ciudadanía. Por supuesto, esto no va de trepas.

 Hay que tener mucha desfachatez para querer excluir a quienes estaban luchando por políticas sociales, democráticas y de sostenibilidad, mientras los ciudadanos ahora renacidos vegetaban políticamente y votaban a uno de los partidos que han provocado la crisis actual. Y, además, el señor González Suárez pide a los partidos que no se presenten porque sabe que, si se presentan, su candidatura obtendría unos pocos cientos de votos y punto. Y, puestos a pedir, también podría pedir a PP, PSOE y CC que no se presenten para abrir todo el espacio al Verdadero Ciudadano. Pero sabe que en los tres partidos grandes la ingenuidad es un bien escaso.

 Sin embargo, como los impulsores de la propuesta ciudadanista-adanista no tienen programa, se limitan a proponer un método: primarias y punto. El objetivo es mezclar todo tipo de gente, aunque tengan ideologías distintas que, antes o después, entrarán en conflicto y vaciarán de contenido todo lo que pueda haber de alternativo en el programa futuro porque, a fin de cuentas, siempre quedará lo importante: el concejal González Suárez, u otro prototipo equivalente. Por lo visto, González Suárez no se ha enterado de que los partidos a los que pide la retirada, ya elegían democráticamente sus candidaturas. La democracia ya existía antes del autohallazgo del yo del hiperciudadano.

 Si alguien quiere montar una ONG para trabajar contra la pobreza supongo que no se atreverá a pedir la disolución de Cáritas. Y, si alguien quiere hacer un nuevo partido porque está en contra de los partidos corruptos, lo lógico sería que no pidiera la disolución de los partidos que han luchado contra la corrupción. Porque pedirle a un partido que no se presente es pedirle que se disuelva. Y es despreciar su trayectoria y el esfuerzo ciudadano de sus integrantes. Sin embargo, despreciar el trabajo de quienes han hecho otra política durante años es tan “correcto” que se pide a los “despreciados” que apoyen a los “despreciadores”. 

 Es evidente que estas iniciativas sólo servirán para desarticular a la izquierda justo cuando puede crecer como nunca y, si no, tiempo al tiempo. Algo similar puede estarse produciendo en el Puerto de la Cruz. En ambos casos el ciudadanismo adanista sólo sirve para debilitar a las izquierdas organizadas, con trayectoria de lucha y coherencia. Y, ese ciudadanismo adanista, se aprovecha de la buena voluntad y de la honestidad de la gente de las organizaciones políticas de la izquierda coherente que, ingenuamente, están dispuestos a ceder puestos y protagonismo a aspirantes a políticos que despotrican de los políticos, al menos hasta que ellos lo sean.

 Un consejo a la izquierda política de La Orotava y de otros municipios: únanse y ganen sus municipios, que pueden hacerlo y son ustedes los que atraen lo votos y no los súperciudadanos que van a tener siglas distintas en cada municipio y van a reventar las posibilidades de representación en Cabildos y Parlamento por la fragmentación que van a provocar en nombre de la unidad. Parece mentira que organizaciones como IpO y, en particular IUC (que sacó 25.000 votos sólo en Tenerife en mayo) y SSP, no aprendan las lecciones del pasado y vayan a repetir exactamente los mismos errores. No se desactiven para activar a los que sólo se activan cuando ven poltronas, eso sí, con un discurso antipoltrona.

Samuel González, profesor de matemáticas. 

* Publicado con autorización del autor