Pacifismo y neutralidad en Ucrania - por Emilio Díaz Miranda

En medio del tronante ruido adoctrinador de los medios de Información que acompañan al trágico conflicto ucraniano aparece, de vez en cuando, un pequeño rayo de luz y se oye una tenue voz que proclama la necesidad de acabar con la escalada de armamento y dinero para objetivos militares estratégicos que no son los deseados por los ciudadanos normales.

Uno de estos rayos de esperanza que dan algo de luz a los anhelos de una vida en paz es el que me ha llegado por email en el día de hoy, 26 de abril, a las puertas del Primero de Mayo, fiesta conquistada por el movimiento de los Trabajadores a nivel internacional, menos en los Estados Unidos, es decir, un llamamiento a unir la Fiesta de los Trabajadores con la Paz Universal.

El correo electrónico me llega de uno de los movimientos pacifistas alemanes  que tenía y tiene contacto con los pacifistas ucranianos, ahora con dificultades y perseguidos por el poder de Zelensky y los partidos que siguen el camino de la confrontación militar y ahogan cualquier voz disidente, con carcel o desempleo. Recuerdese que Zelensky ha prohibido más de 11 partidos políticos, uno de ellos con 40 diputados en el Congreso ucraniano, por no estar de acuerdo con el curso beligerante que sigue produciendo destrucción y muerte, dejando en ruinas para décadas la economía ucraniana.

He traducido el texto alemán que es el que he recibido, no del original ucraniano.

Yo personalmente creo que el texto es de una gran ingenuidad política, pero que sería deseable que sus llamamientos se cumpliesen en este mundo dominado por oligarcas, sean estos rusos o americanos, europeos o africanos, indonesios o ucranianos. Mientras reine el supremo y único mandamiento del beneficio capitalista y del poder de las élites politicastras no será posible conseguir la paz universal, ni tampoco la paz parcial, sea en Ucrania o en Palestina, o sea en cualquiera de los más de 20 focos bélicos que arden actualmente y que poco o nunca salen en los medios “informativos“.

Zelensky en su papel como Presidente continúa el camino de la movilización total, obligando a todos los hombres a militarizarse obligatoriamente tras la declaración del “estado de guerra“ y de haber repartido indiscriminadamente armas entre civiles sin control.

Desde mi escepticismo, pero desde mi activo deseo de que se alcance la Paz negociada en este conflicto bélico que puede derivar en conflicto nuclear suponiendo la destrucción radioactiva de la Europa en que vivo, doy paso a la Declaración pacifista ucraniana, perseguida ahora en la propia Ucrania como derrotista o traidora. Que el lector juzgue si tal declaración es criminal  y propia de prohibición o si es una idea o deseo razonable, sea cual sea la  opinión que le merezca.

Declaración del Movimiento Pacifista Ucraniano 

Los habitantes de nuestro país y de todo el planeta corren un peligro mortal a causa del enfrentamiento nuclear entre las civilizaciones de Oriente y Occidente. Debemos detener la acumulación de tropas, la acumulación de armas y equipos militares en Ucrania y sus alrededores, el insano verter el dinero de los contribuyentes al horno de la máquina de guerra, en lugar de resolver los agudos problemas socioeconómicos y ecológicos. Debemos dejar de complacer los crueles caprichos de los mandos militares y los oligarcas que se benefician del derramamiento de sangre.
El movimiento pacifista ucraniano condena la preparación de Ucrania y de los Estados miembros de la OTAN para la guerra con Rusia.
Exigimos la desescalada y el desarme mundial, la disolución de las alianzas militares, la eliminación de los ejércitos y de las fronteras que separan a los pueblos.
Pedimos una solución pacífica inmediata del conflicto armado en el este de Ucrania en torno a Donetsk y Luhansk basada en:
1) el mantenimiento absoluto de un alto el fuego por parte de todos los combatientes proucranianos y prorrusos y el cumplimiento estricto del paquete de medidas para aplicar los acuerdos de Minsk, aprobado por la Resolución 2202 (2015) del Consejo de Seguridad de la ONU;
2) Retirada de todas las tropas, cese de todas las entregas de armas y equipos militares, cese de la movilización total de la población para la guerra, cese de la propaganda de guerra y de la hostilidad entre civilizaciones en los medios de comunicación y en las redes sociales;
3) Llevar a cabo negociaciones de paz y desarme abiertas, inclusivas y exhaustivas en un formato de diálogo público entre todas las partes estatales y no estatales del conflicto, con la participación de los actores de la sociedad civil en la construcción de la paz;
4) Consagrar la neutralidad de nuestro país en la Constitución de Ucrania;

5) Garantizar el derecho humano a la objeción de conciencia al servicio militar (incluida la negativa a recibir formación para el servicio militar), de conformidad con el artículo 18 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y los párrafos 2 y 11 de la Observación General nº 22 del Comité de Derechos Humanos de la ONU.
La guerra es un crimen contra la humanidad. Por lo tanto, estamos decididos a no apoyar ninguna guerra y a esforzarnos por eliminar todas las causas de la misma.

-.-#

Hasta aquí el texto. El futuro nos dirá si tal declaración ha encontrado oídos en las altas esferas de la Unión Europea o en los palacios presidenciales de Kiev, Washington o Moscú.

* La casa de mi tía agradece la gentileza de Emilio Díaz Miranda