El Ejército mantiene numerosos símbolos, placas y escudos franquistas en los cuarteles y en salas del Estado Mayor  Carlos Enrique Bayo en PÚBLICO

¿Quedó todo atado y bien atado? - por Antonio Aguado, coherente veterano militante socialista.

La frase del dictador y genocida Franco: ”dejo todo atado y bien atado”, viendo la simbología franquista en los cuarteles y sobre todo el ambiente que en gran medida se respira en el ejercito, parece que le ha dado la razón.

Incomprensible e intolerable, que después de tanto tiempo de “una democracia plena” y habiendo pasado varios gobiernos socialistas (los de derecha no se cuentan porque no están por la labor), incluido el actual, no se le haya puesto remedio a ésta situación y la ultraderecha siga campando a sus anchas en las fuerzas y cuerpo de seguridad del Estado.

¿Como en pleno siglo XXI siguen existiendo las reaccionarias Legión (1920) y Guardia Civil (1844), fundadas por los fascistas comandante Jose Millán Astray y duque de Ahumada Francisco Javier Girón Espeleta respectivamente.

Por qué no se les ha exigido responsabilidad  a los mandos del ejercito jubilados, que redactaron y firmaron un manifiesto instando a un golpe de estado y exponiendo que para solucionar el mal de "su España", habría que fusilar a 26 millones de españoles y no se les ha aplicado ninguna sanción y peor aún,  puedan seguir utilizando las residencias de oficiales donde se mezclan con otros en activo  a quienes lo más probable, les aleccionan y conminan con sus convicciones y discursos golpistas. 

Por la gravedad de lo que protagonizaron deberían ser sancionados jurídicamente de forma ejemplar y en lo que respecta a la utilización de los pabellones residenciales de los jefes y mandos, la sanción que se les debería aplicar prohibiéndoles la entrada y uso de esas instalaciones, no es dificil y compleja por ser meramente reglamentaria y administrativa.

El ejercito (la clase de tropa), al ser exclusivamente profesional, está sustentado casi en su totalidad por jóvenes de familias humildes, que lo tienen como formula para resolver su futuro y sustento. Es muy injusto que los “grandes patriotas”, que "tanto aman a su España”, debido a su privilegiada condición social y económica, puedan librarse del servicio militar. Habría que buscar formulas para acabar con semejante injusticia y procurar la democratización del ejercito. Podría ser mitad profesional y la otra mitad indiscriminadamente de reemplazo.

En ese sentido, hay ejemplos de ejércitos más democráticos y justos como el suizo, con solo un 5% de soldados profesionales y el resto voluntarios y reservistas, mantienen ésta condición desde los 19 a 34 años con periodos de instrucción de 18 a 21 semanas.

Suecia desde 2017 abolió el ejercito profesional y ha vuelto a implantar la mili obligatoria.

Fue muy significativo el documental del cineasta americano Michael Moore, cuando en plena Guerra de Irak a la salida de los congresistas del Capitolio les preguntaba si tenían algún familiar luchando en ese conflicto y contestaban negativamente o siendo lo mismo, daban la callada por respuesta. En definitiva, la extracción social y económica de los soldados eran de familias humildes y en gran medida negros y latinoamericanos.

* La casa de mi tía agradece la gentileza de Antonio Aguado Suárez