El saqueo produce rebelión - por María Puig Barrios

Quién mucho quiere ganar, suele perderlo todo  (Jean de La Fontaine)

 hay nada que cause más indignación a una persona  trabajadora que el saqueo del fruto de su esfuerzo, realizado a lo largo de toda su vida: las rentas de su trabajo, su vivienda pagada con muchos sacrificios y todos sus derechos conquistados uno a uno. Y más cuando este saqueo se realiza por parte de vividores o vividoras sin escrúpulos de ningún tipo que pretenden obtener ganancias, y vivir opíparamente de los hombres y mujeres que han dedicado toda su vida al trabajo. Sin medir las consecuencias. Sin entender que la paciencia y la responsabilidad de las personas trabajadoras tienen un límite. Sin entender que cuando se sobrepasa esos límites, empieza la rebelión frente al abusivo saqueo, y con ella las soluciones menos esperadas por los vividores y las vividoras. Y es que YA NADA IMPORTA. Sólo la DIGNIDAD. Y  los abusadores y abusadoras se quedarán sin nada. Ha ocurrido históricamente. Como sentencia Jean de la Fontaine en sus fábulas sobre las actitudes humanas: “Quién mucho quiere ganar, suele perderlo todo”.

María Puig Barrios