Últimas reflexiones y una propuesta - por Luis Alsó, Attac Canarias *

    La pandemia  del coronavírus sigue enloquecida y enloqueciendo. Mientras los gobiernos y los “expertos” traten de  encontrarle alguna lógica como a las epidemias del pasado y rechacen cualquier teoría de la conspiración por “conspiranoica” (valga la redundancia) estarán “dando palos de  ciego” como víctimas de una creciente desorientación, porque eso es lo que buscan, precisamente los conspiradores que la manejan.  Pongamos solo un ejemplo reciente. La  comunidad de Asturias  se venía poniendo como  modelo de región  con la pandemia  controlada, con los más  bajos índices de contagio y de fallecimientos de toda la península. Pues bien, repentinamente, y  sin haber habido ningún cambio en esa“gestion ejemplar” del gobierno asturiano, se produce  un giro de 180 grados y pasa a ser la  las región con peor índice sanitario de toda España. Y no es el único caso (Burgos, Logroño, o Barcelona  han sido otros ). La única teoría que lo explica: la existencia de un ejército de “contagiadores en la sombra” que reciben órdenes (y dinero) para crear  con estas “oleadas” un estado de confusión y desmoralización útil a sus fines . Sin embargo hay dos países “conspiranoicos” que sostienen esa teoría y  vigilan estrechamente sus fronteras para mantener a raya a los contagiadores  que tratan de colarse: China y Corea del Norte. Y da la casualidad de que son los únicos del mundo que han vencido la pandemia, pese a no ser países pequeños,  aislados. o poco poblados. China, el país donde empezó, es uno de los más grandes del mundo geográfica y  demográficamente, y representa !que casualidad¡ la principal amenaza para el imperialismo capitalista, a quien culpa de “fabricar” la pandemia.  Sin embargo la India, otro país grande y fronterizo con China, que no es “conspiranoico” ni apenas vigila sus fronteras, ha sido devastado por la pandemia. Y los gobiernos europeos siguen difundiendo  entre la población que quienes los están diezmando son virus de murciélagos o de armadillos (que, al parecer, entienden de política). Y la población, incluido algún sector de la izquierda, “traga” mansamente el bulo, y espera resignada una vacuna salvadora, en medio de una vergonzosa rebatiña entre las grandes farmacéuticas capitalistas para ver quien la vende primero. 

     Habría que mencionar también a Cuba, otro país aislado (es una isla) y vigilado, que con once millones de habitantes, ostenta una cifra de fallecimientos de poco más de un centenar de personas. Por cierto, que Cuba, que ya ha presentado su propia vacuna  en la OMS, ha venido ayudando a otros países más necesitados con tres fármacos de eficacia comprobada en la primera fase de la infección: dexametazona, Interferón- 2, e hidroxicloroquina. Esta última sufrió un masivo ataque mediático de la gran prensa capitalista, que llegó a afirmar que no solo era ineficaz sino que provocaba, además, graves efectos secundarios. Desmentido esto por el más prestigioso virólogo de Francia, que ratificó su eficacia, provocó que la prestigiosa revista  científica “The Lancet” tuviera que publicar un artículo de rectificación. 

    Otro tema que demuestra que esta “segunda ola” de la pandemia, no es anárquica sino que sigue un guión elaborado y controlado por un poderoso grupo de personajes que, como dijimos en los escritos anteriores, pretende despoblar drásticamente el planeta para frenar el cambio climático y salvar el capitalismo. Se trata del macabro genocidio de los ancianos, que en la primera oleada murieron “como chinches” en las residencias donde estaban ingresados. El número de defunciones, recordarán, llegó a representar el 50% de todos los fallecidos. Prometieron que eso no volvería a pasar porque se tomarían las precauciones necesarias para ello. Sin embargo, y refutando aquellas declaraciones,  en esta segunda “oleada” los ancianos  vuelven a morir  masivamente (de nuevo representan el 50% de todos los fallecidos, acumulando ya un total de de 23000 muertos entre las dos oleadas) en sus residencias, incluyendo varias remotas de la “España vacía”, donde el coronavírus  empieza a hacer misteriosas visitas. No se dan explicaciones, y se dejan caer algunas  curiosas hipótesis en los medios públicos; como Televisión Española, donde la locutora Ana Blanco dijo (telediario del mediodía del martes 17 de Noviembre) que esos desconcertantes decesos podrían deberse a que algunos de los sanitarios que trabajan de las residencias fuesen “asintomáticos sin saberlo ” y contagien con su contacto a los ancianos. Esta posibilidad, además de reforzar las sospechas  de que los  “asintomáticos” en multitud fueron creados para ocultar a contagiadores profesionales, dejaría en el aire un grave interrogante: ¿ son destinados sanitarios a residencias de ancianos sin hacerles previa y regularmente un PCR o un test?. Los que le hablaron al oído a la Sra. Blanco tenían que habérselo  pensado mejor...La regularidad y cantidad de las muertes de ancianos  solo pueden explicarse por un plan macabro previamente diseñado. 

     Pero la eficacia de los contagiadores  profesionales exige, como complemento, colocar  agentes ocultos del programa orwelliano en los gobiernos de algunos países. ¿Y que mejor que el Ministerio de Sanidad  para dirigir la nave  estatal y estrellarla contra los acantilados?. En  España, por ejemplo  el Sr .Illa lo hace muy bien, después de una carrera meteórica y llena de incógnitas, que le da, al parecer, poder para no contestar a incómodos preguntas formuladas por el Consejo de Transparencia. Illa, pese a ser su deber, lleva varios meses sin contestar a dicho organismo quince preguntas de diecisiete que se le han hecho, algunas muy importantes como los datos con que  elabora  sus amedrentadoras estadísticas, como la del  aumento fulgurante de  supuestos “asintomáticos” que se mueven por todos lados como “el hombre invisible”, dificultando los rastreos.  Su oposición tenaz a que  la lucha contra la pandemia las controlen  las autoridades autonómicas hizo  historia en el caso de Madrid. Pero además, un mando sanitario de una residencia que iba a proceder al traslado de sus ancianos a una ubicación más segura, acaba de declarar en  una entrevista radiofónica, que  dicho traslado  fue abortado “por una orden de la superioridad”.

    El caso de Madrid merece, en efecto, un punto y aparte porque puede marcar un hito decisivo en la evolución de la pandemia en nuestro país;  pues , por ahora,  su resultado ha sido que Madrid haya  bajado del primer  puesto en número de contagios en España, al último.  El conflicto empezó , en efecto, por la decisión de aislar ciertos barrios obreros, por la alta incidencia en ellos de los contagios. El gobierno madrileño, que no compartía ese diagnóstico, se opuso (y los barrios también, pero echándose a la calle). Posteriormente el gobierno madrileño propuso practicar “tests de antígenos”(en sustitución de los PCR,  mucho más lentos y caros); y que con la colaboración de las farmacias permitirían amplios “barridos” de la población madrileña” proporcionando un diagnostico más fiel que la cifras “infladas” del ministerio. Illa opuso una resistencia numantina (porque los rastreos rápidos podrían desenmascarar a los falsos asintomáticos, que, como  ya hemos dicho, son en realidad cortinas de humo para esconder a loscontagiadores profesionales). Lo cierto es que gobierno madrileño tuvo que desplazarse a Bruselas y  hablar con el Colegio de Farmacéuticos para ver su plan aprobado (y “dulcificada”la oposición de Illa). Pero lo más importante de toda ésta historia es que la autorización y apoyo que han recibido el uso de los “test de antígenos” y la colaboración de las farmacias, puede abrir una nueva y positiva etapa en la lucha para la erradicación de la pandemia en nuestro país y, posiblemente, en Europa. Recordemos que los  países que erradicaron la “primera ola” fueron Singapur y Corea del Sur, ambos con rastreos rápidos y masivos. Al hacerlos imposibles la “explosión” de asintomáticos volvieron a sufrir una “segunda ola” (Corea del Sur ya va por la  tercera!) . Recuperada la posibilidad de rastreos rápidos y baratos con los “tests de antígenos”, la curva de contagio está bajando en toda  España. Léase, al efecto,  El País del domingo día 6 de Diciembre, que en su página n.º 34, trae un artículo titulado “Como los tests de antígenos están cambiando la pandemia”.

    Canarias ha clamado, infructuosamente hasta ahora, por ellos, pues ayudarían a recuperar nuestro turismo. Además han aparecido  en el mercado aparatos para hacer tests familiares, que ya están también siendo desautorizados por el ministerio de Sanidad. La guerra sigue: Bill Gates, que tiene, al parecer, el don de ver el futuro, ya ha anunciado una “tercera ola” para principios del próximo año. ¿Y las vacunas?: serán inofensivas para el nuevo virus “mutado” que prepara.    

    Pero hay dos nuevos descubrimientos que echan por tierra los erráticos consejos  y advertencias que nos han venido dando supuestos “expertos”: 1) no predominan los contagios individuales en la expansión del vírus, sino que hay “supercontagiadores” que contagian ellos solos a decenas de personas; 2) los lugares  tampoco son iguales; los hay donde el contagio es considerablemente mayor que otros; y 3) el virus se contagia mayormente por aerosoles. Ello haría caer por tierra la teoría del “contagio social” (botellones, barbacoas, fiestas familiares, etc.) como causante, en favor de nuestra teoría: contagio planificado, y ejecutado por contagiadores profesionales, probablemente con aerosoles.

     El problema de Canarias es especialmente angustioso: Víctor Torres, presidente de Canarias, rehúsa por ahora dar un “ultimatum” al Gobierno central, como hizo el de Madrid (porque Pedro Sanchez, que es de su mismo partido, respalda ciegamente a Illa). Si esta situación se mantiene, podría perderse la temporada turística de invierno (la más importante para el archipiélago), ya que los turistas alemanes se niegan a hacerse un engorroso PCR a su llegada (pero no un rápido “test de antígenos”). Ello, según avisan conocedores del tema, podría significar la pérdida definitiva del turismo germánico (y el de otros países europeos) abocando a Canarias a una catástrofe económica sin precedentes. Sólo una fuerte movilización ciudadana que presione al Gobierno Canario y al de España puede romper  esta encrucijada paralizante. 

 -Los miembros de ATTAC-Canarias no podemos permanecer confinados en nuestra casa “esperando que pase el cadáver del enemigo”; o esperando por vacunas salvadoras: las vacunas no matan el hambre. Eso es lo que el enemigo busca, que el terror nos inmovilice; (¿lo ha logrado ya?). Por todo ello, creo que las circunstancias nos abocan a una tarea inmediata y crucial: impulsar, con la ayuda de otros colectivos, una amplia movilización ciudadana en torno a un manifiesto que recoja las siguientes reivindicaciones:

-Sustitución del PCR por un “test de antígenos” para los turistas al llegar al aeropuerto, costeado por le Gobierno canario. Dicho test, y su uso en farmacias, ya han sido respaldados por la Unión Europea.

-Exigencia de que el Gobierno de España dé los nombres y currículums del“Consejo de expertos” que “asesora” a Illa.   

-Exigencia también de que conteste las 15 preguntas pendientes del “Consejo de transparencia”

-Que el gobierno autorice también, y sin demora, cualquier aparato  capaz de hacer “tests de antígenos” para uso personal o familiar.

-Que el archipiélago no se convierta en un campamento de refugiados ilegales, como ocurre con varias islas griegas. Ni se les puede mantener indefinidamente recluidos,  ni se puede dejar que pululen libremente por las calles, pues son miles de africanos ante los que el turismo se siente atemorizado o incómodo. La mayoría procede de países destruidos por bombardeos de ejércitos europeos (sobre todo de Francia e Inglaterra) sobre Libia, que acogía y daba trabajo a dos millones de subsaharianos. Son ellos, pues, los que deben acogerlos ahora. Canarias puede ser un archipiélago de acogida de emigrantes, o un archipiélago turístico; pero no puede ser ambas cosas a la vez.

-Exigir, junto al resto de las autonomías de España, que el ministerio de Sanidad investigue y explique las causas de la  insólita y desconcertante regularidad del fallecimiento masivo de ancianos en ambas oleadas; y que el Ministerio de Justicia actúe sin dilación si se evidenciasen responsabilidades penales.

                                                      LUIS ALSÓ P EREZ

P.D. 

    Después de acabar este trabajo se han producido algunos acontecimientos importantes:

-El presidente canario Angel Victor Torres, ante las evasivas de Illa, ha “cogido el toro por los cuernos “ y ha dictaminado la legalidad de “los tests de antígenos” para los turistas que lleguen a Canarias en la temporada de invierno. 

-Se están desplazando silenciosamente remesas de emigrantes de Canarias a la península.

-En la tertulia de TVE “Las cosas claras”, que se   emite justo antes del telediario de las dos de la tarde en Canarias, un veterano tertuliano andaluz acaba de exigir una investigación que esclarezca la desconcertante regularidad de la muerte de ancianos por el covid-19 durante toda la pandemia.

-La situación en que nos encontramos es apremiante no solo por la pandemia, sino también por la

 grave crisis económica que conlleva, que puede impedir que lleguemos a tiempo de frenar el calentamiento global por debajo de dos grados en el año 2.030, para que no se vuelva incontrolable.