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jueves, 28 de marzo de 2024 09:57h.

"La única minoría peligrosa son los ricos" - por Francisco Morote

 

FRASE MOROTE

Exposición desarrollada por Francisco Morote, de Attac Canarias, el martes 05.02.2019 en Café d´Espacio de Las Palmas de Gran Canaria, en la Mesa Redonda "La única minoría peligrosa son los ricos", organizada por Anticapitalistas de Gran Canaria

"La única minoría peligrosa son los ricos" - por Francisco Morote Costa, presidente honorario de Attac Canarias *

¿ Verdadero o falso ?

Formularé algunas preguntas y respuestas para tratar de contestar a esa interrogante.

 Primera pregunta, ¿ es cierto o no que existe una minoría de ricos o, más bien, de superricos? 

"La desigualdad está creciendo. Las personas están cuestionando un mundo en el que un puñado de individuos posee la misma riqueza que la mitad de la humanidad". 

¿ Quién ha pronunciado esa frase? ¿ Ha sido una persona cualquiera? No, lo ha hecho Antònio Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas en su Mensaje de Año Nuevo de 2019, y alguien con ese cargo y con esa responsabilidad no puede hablar a la ligera.

 "Un puñado de individuos posee la misma riqueza que la mitad de la humanidad", dice Guterres. ¿Alguien solvente respalda una afirmación tan contundente, tan rotunda? 

Sí, lo hace, por ejemplo, en su Informe de 2019 titulado "¿Bienestar público o beneficio privado?", Oxfam, una confederación internacional formada por 17 ongs nacionales que realizan labores humanitarias en 90 países. En efecto, según Oxfam, en 2018 tan solo 26 súperricos poseían tanta riqueza como 3.800 millones de personas, que constituyen la mitad de la población mundial. Esos súperricos sumaron a su fortuna  900.000 millones de dólares más en ese año, 2.500 millones de dólares diarios, en tanto que la riqueza total en manos de la mitad más pobre de la población disminuyó un 11% y 3.400 millones de personas que rozan la pobreza extrema viven con menos de 5 dolares y medio diarios. 

Bien podría decirse, pues,  que nunca tan pocos tuvieron tanto, ni tantos tuvieron tan poco. 

Y por si no bastara, cabe decir que el fenómeno de la concentración de la riqueza es creciente, porque si en 2017 aún eran 43 los individuos que concentraban ellos solos tanta riqueza como la mitad de la población mundial, en 2018 fueron, como hemos visto 26, o sea 17 menos.

Segunda pregunta. ¿ Es razonable, es tolerable un mundo en el que "un puñado de individuos" posee tanta riqueza como la mitad más pobre de la humanidad?

Volvamos de nuevo a las palabras del Secretario General de la ONU: "La desigualdad está creciendo. Las personas están cuestionando un mundo en el que un puñado de individuos posee la misma riqueza que la mitad de la humanidad". De la última frase nos fijaremos ahora en el comienzo: " Las personas están cuestionando un mundo...". ¿ qué quiere decir esto?  ¿ Qué plantea Guterres al decir que las personas están cuestionando un mundo...? Pues, según mi interpretación, que una mayoría de la población mundial está empezando a poner en duda un orden, un régimen, un sistema socioconómico en el que la riqueza  se reparte tan desigualmente que una exigua minoría concentra una parte cada vez mayor de la tarta, dejando para la mayoría social una parte cada vez menor de ella.

Tercera pregunta. ¿ Es peligrosa entonces una minoría de ricos o, más bien, de súperricos que no cuestiona un mundo en el que la brecha entre una minoría de ricos y una mayoría de pobres y empobrecidos es cada vez grande?

Para mi sin duda que lo es. Porque esa minoría de individuos privilegiados, como el personaje de Voltaire Pangloss, están convencidos de vivir en el mejor de los mundos posibles y, por consiguiente, están dispuestos, al menos por ahora, a defender indefinidamente el orden económico y social capitalista hasta sus últimas consecuencias. Y es ahí donde radica su peligrosidad porque tienen los medios económicos, mediáticos, políticos y si, es preciso, policiales y militares para tratar de perpetuar su mundo panglosiano. Aunque para ello tengan que hacer la guerra a los pobres, es decir, a la gran mayoría de la población que vive en la pobreza o a la que su mundo panglosiano condena al empobrecimiento.

¿La prueba de su voluntad de hacer la guerra a los pobres o, en realidad, a todos los que no sean ricos?

Escuchemos a un miembro prominente y distinguido de esa élite del 1% de la población mundial cuyo lema parece ser el " Todo para nosotros y nada para los demás". Me refiero al multimillonario estadounidense Warren Buffet, que en 2018 ocupaba la tercera posición en la lista de hombres más ricos del mundo, con una fortuna estimada en 87.000 millones de dólares: "Hay una guerra de clases, de acuerdo, pero es la mía, la de los ricos, la que está haciendo esa guerra, y vamos ganando" , decía en 2011, en el momento álgido de la Gran Recesión capitalista que había comenzado en 2007-8.

En fin, allí donde estén, sea en el Foro Económico Mundial de Davos, en el Club Bilderberg o en otros círculos para privilegiados panglosianos, estos modernos burgueses sin levita ni chistera intentarán, como lo intentaron antes los patricios o sea los ricos en Roma, o luego los nobles, es decir, los ricos en el Europa medieval, moderna e, incluso, contemporánea, justificar la eternización de su mundo, de su sistema, porque como sostenía el famoso primer ministro británico Winston Churchill: «el capitalismo es el peor de los sistemas, a excepción de todos los demás».  

Y cuarta pregunta ¿ Qué hacer frente a una minoría de ricos y súperricos dispuestos a defender con uñas y dientes un sistema que condena al planeta, y con él a la humanidad, a un cambio climático catastrófico y a una fractura social sin precedentes?  ¿ Qué hacer? 

Abatir su poder. Ante la situación de emergencia ecológica y social que vivimos, abatir su poder desorbitado, porque para que otro mundo mejor ecológica y socialmente sea posible el primer e inevitable paso a dar consiste en abatir el poder de la élite de súperricos y ricos  cuya opulencia les permite controlar a los medios de comunicación de masas, a los partidos políticos, a los gobiernos y Estados y a las instituciones internacionales ( Bancos Centrales, Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, Organización Mundial del Comercio, etcétera )  desde los que dirigen el  mundo. Ellos son los enemigos de la democracia, el verdadero obstáculo para que la gran mayoría de la humanidad pueda construir un mundo socialmente más justo y ecológicamente sostenible.

En fin, convenzámonos, con una minoría de ricos y súperricos que concentra la riqueza en sus manos no podemos tener una auténtica democracia. Solo hay una solución, poner fin a ese estado de cosas, abatir el poder desorbitado de los más ricos. O la riqueza se redistribuye por medio de un nuevo orden financiero internacional y nacional (banca pública, desaparición de la banca privada con ánimo de lucro) y fiscal (reformas fiscales progresivas radicales, supresión de los paraísos fiscales) y restableciendo la prioridad de lo público (bienes, sectores y servicios públicos), sobre lo privado (bienes, sectores y servicios privatizados), o lo que seguiremos teniendo será una plutocracia - el gobierno de los ricos, por los ricos y para los ricos -, disfrazada de democracia, porque como ya advertía el juez de la Corte Suprema de los EEUU  L.D. Brandeis:  "Podemos tener democracia o podemos tener la riqueza concentrada en pocas manos, pero no podemos tener ambas". 

Grabación de la charla en RADIO GUINIGUADA

https://www.ivoox.com/sansofe-2019-02-06-audios-mp3_rf_32322636_1.html

 

* La casa de mi tía agradece la gentileza de Francisco Morote

FRANCISCO MOROTE ATTAC

 

MANCHETA 9

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