La organización Ben Magec- Ecologistas en Acción presentó ayer alegaciones al expediente de delimitación del Bien de Interés Cultural Grabados Rupestres de La Montaña de Tindaya elaborado por el Cabildo de Fuerteventura, pidiendo la nulidad del mismo por considerarlo malintencionado y falto de rigor científico.

Ayer finalizaba el periodo de información pública de la incoación del expediente de delimitación del BIC Grabados rupestres de la Montaña de Tindaya y la de su entorno de Protección.

Ben Magec- Ecologistas en Acción ha presentado alegaciones en las que fundamenta, entre otras cuestiones, que es incorrecto el propio objeto de incoación del expediente puesto que se centra únicamente en los grabados que se encuentran en la cima, cuando los informes y  estudios técnicos existentes avalan que debe ser considerada toda la montaña como Zona Arqueológica (cima, ladera y base) pues ésta conforma el conjunto arqueológico que da soporte y sirve para explicar los grabados podomorfos.  Pepe Guillén, arqueólogo  y miembro de Ben Magec- Ecologistas en Acción considera que “no se entiende cómo el propio Cabildo ha utilizado un criterio integral para delimitar otras zonas arqueológicas como Tinojay o el Barrando del Cavadero y sin embargo en el caso de Tindaya se circunscribe a proteger estrictamente los grabados”.

Ben Magec quiere recordar que esta propuesta de delimitación se lleva a cabo después de que en septiembre del pasado año el Tribunal Superior de Justicia de Canarias diera la razón a la federación ecologista anulando parcialmente las normas de Conservación propuestas para el Monumento Natural de Montaña de Tindaya, instando en dicha sentencia al Cabildo a delimitar el Bien de Interés Cultural que constituyen por ministerio de ley estas manifestaciones de arte rupestre. La comunidad de arqueólogos de Canarias y la Federación Ecologista llevan pidiendo a la administración que delimite este BIC desde hace casi dos décadas, como es su responsabilidad, para sacar a la montaña de la inseguridad jurídica en que se encuentra. Uno de los colectivos federados de la isla de Fuerteventura, Guanil, ha venido denunciando  en los últimos años el deterioro y expolio sufrido por los grabados de la montaña y que se deriva en parte de esta situación de limbo legal. Ahora el Cabildo inicia este trámite de delimitación con una sospechosa rapidez y basándose en una lectura parcial e interesada de los estudios científicos y técnicos a su disposición. Noelia Sánchez, portavoz de la Federación, pide al Cabildo de Fuerteventura que “abandone de una vez por todas cualquier intención de realizar en Tindaya otro tipo de proyecto que no sea el de la salvaguarda y promoción de los valores naturales, paisajísticos y patrimoniales que son intrínsecos a la montaña, actuando con responsabilidad en la delimitación del BIC para que no sea de nuevo y a toda costa un coladero del monumento de Chillida, una obra que ya ha costado más de cuarenta millones de euros a los contribuyentes sin mover ni una sola piedra”. En este sentido, la federación ecologista advierte que seguirá vigilante a todo lo que concierne a la protección de la Montaña de Tindaya, como ha hecho hasta ahora, realizando en cada momento las acciones de denuncia social y legal que consideren pertinentes.

Se adjuntan asimismo las alegaciones presentadas que pueden consultarse para conocer la totalidad de criterios que se argumentan pidiendo la nulidad del acto de incoación de la delimitación del mencionado BIC.

Texto de alegaciones