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sábado, 20 de abril de 2024 00:29h.

Aplazado hasta el 8 de febrero el juicio a los presos políticos saharauis del Grupo de Gdeim Izik

Brahim Dahan, presidente de la Asociación Saharaui de Víctimas, denuncia que este aplazamiento forma parte de una táctica marroquí para debilitar y reducir la presencia de personas y organizaciones internacionalesel próximo 8 de febrero



 
Aplazado hasta el 8 de febrero el juicio a los presos políticos saharauis del Grupo de Gdeim Izik Imprimir E-Mail
 
Brahim Dahan presidente de la Asociación Saharaui de Víctimas, denuncia que este aplazamiento forma parte de una táctica marroquí para debilitar y reducir la presencia de personas y organizaciones internacionalesel próximo 8 de febrero
 
ImageSB-Noticias.-

Este viernes tenía que haberse celebrado el juicio contra 24 jóvenes saharauis, detenidos tras el desmantelamiento-protesta de Gdeim Izik en noviembre de 2010.
 
Un juicio ante el Tribunal Militar de Rabat, a pesar de ser presos civiles. Están acusados arbitrariamente de "atentado a la seguridad interior y exterior del Estado, formación de una banda criminal y atentado a los funciponarios públicos en el ejercicio de su función".

Brahim Dahane, presidente de la Asociación Saharaui de Víctimas de violaciones graves de derechos, indicó a Radio San Borondón que hubo una gran presencia de 52 observadores internacionales, juristas, diplomáticos, representantes de embajadas, abogados así como muchos medios de comunicación internacionales especialmente españoles.
 
Dahan denució que se impidió el acceso a la Sala a medios de comunicación como una Agencia argelina, el diario El Mundo o la Cadena Ser. Tampoco permitieron el acceso a los defensores de derechos humanos.
 
Finalmente el juicio fue abortado porque la defensa de los activistas pidieron la presencia de una serie de testigos que el juez denegó, como el caso de un ex ministro marroqui o una parlamentaria cuya palabra era importante porque eran las personas que llevaron las negociaciones con el grupo de Gdeim Izic, sin embargo su presencia fue rechazada por el juez, con la excusa de que no era necesario. 

Brahim Dahan denuncia que este aplazamiento forma parte de una táctica marroquí para debilitar y reducir la presencia de personas y organizaciones internacionales que previsiblemente tendrán dificultades para regresar en 8 días o permanecer en Rabat.