Bety Barreto, ex dirigente del CCN, afirma que Ignacio González no está en política por ideología sino para impulsar sus proyectos personales
Bety Barreto, ex dirigente del CCN en La Laguna y comentarista de la actualidad política, dijo en La Trapera de Radio San Borondón que la suerte que ha tenido Ignacio González es que se ha tropezado con gente que necesita de sus mentiras para afianzarse en cargos de los que obtener un buen sueldo y afirma que a la mayoría de dirigentes del CCN no les une la política, sino el poder y el dinero.
12 de julio de 2012 (07:56 h.)
Una ex dirigente del CCN afirma que Ignacio González no está en política por ideología sino para impulsar sus proyectos personales
Asegura que al presidente del CCN no le interesan personas cualificadas para la política, ni para gestionar el partido o una administración, sino personas conocidas que acumulen votos
SB-Noticias.- Bety Barreto, ex dirigente del CCN en La Laguna y comentarista de la actualidad política, dijo en La Trapera de Radio San Borondón que la suerte que ha tenido Ignacio González es que se ha tropezado con gente que necesita de sus mentiras para afianzarse en cargos de los que obtener un buen sueldo y afirma que a la mayoría de dirigentes del CCN no les une la política, sino el poder y el dinero.
Barreto dijo a diferencia suya, que creyó en el proyecto que le supo vender González hasta que lo conoció a fondo y vio de lo que es capaz el presidente del CCN, la mayoría de quienes forman parte de ese partido saben perfectamente cómo es él, pero les interesa lo que les da, como se demuestra en lo ocurrido en Gran Canaria en donde ha colocado en el Senado a una dirigente del partido, que se da la circunstancia de que es la mujer del consejero en el cabildo de Gran Canaria que traicionó a CC y dio la presidencia a Bravo de Laguna (PP).
Acusa a Ignacio Gonzalez de usar la política y los cargos dentro del partido para obtener réditos personales, para lo cual premia o castiga según los pactos que se alcancen, como ocurrió en Gran Canaria, algo por lo que decidió en su momento salir de esa formación que carece de proyecto e ideología política e incide en que al presidente del CCN no le interesa tener en el partido a personas cualificadas para la política, ni para gestionar el partido o una administración si accede a ella, sino personas conocidas que acumulen votos.
Desde su punto de vista, Ignacio González se ha rodeado de personas que necesitan para vivir las migajas que les va dando, pero también ha tenido la suerte de encontrarse en el camino con partidos que como CC y el PP le dan cancha, porque no es lógico que tras la traición en el cabildo de Gran Canaria y el pacto en las elecciones generales con José Manuel Soria, CC siga manteniendo el pacto con el CCN.
Afirma que a la mayoría de dirigentes del CCN no les une la política, sino el poder y el dinero, y en cuanto a Ignacio González, dijo que ha creado un partido, respaldado por su padre aunque choquen de determinadas cuestiones, para ponerlo al servicio de la familia y de los negocios familiares, como se demuestra con la reforma parlamentaria del artículo 34 de la Ley del suelo que limita las construcciones en las ciudades con la excusa de arreglar el problema del fuera de ordenación que afecta a Santa Cruz de Tenerife.
Para Bety Barreto, si lo que le interesan son los negocios familiares, que se dedique a ellos y que deje de utilizar la política y las instituciones para ello, que engañe a los ciudadanos vendiendo lavadoras o ruedas, pero que no lo haga con los valores, ni con las ideologías, porque si algo tiene claro es que Ignacio González es todo un experto en vender la moto a los ciudadanos a base de falsedades.
“Yo pequé de ingenua, no, lo siguiente” dijo para reconocer que Ignacio Gonzalez la engañó “como a una china” cuando le pidió que formara parte del CCN, dicho lo cual explica que recibió críticas de mucha gente que le advertían de quién es el líder de los centristas, pero a pesar de ello siguió adelante pensando que había cambiado “porque todos tenemos derecho a rectificar alguna vez”, sin embargo poco a poco empezó a verle las mañas, hasta que decidió que no quería formar parte de la gran mentira que es el CCN.
Acusa a Ignacio Gonzalez de usar la política y los cargos dentro del partido para obtener réditos personales, para lo cual premia o castiga según los pactos que se alcancen, como ocurrió en Gran Canaria, algo por lo que decidió en su momento salir de esa formación que carece de proyecto e ideología política e incide en que al presidente del CCN no le interesa tener en el partido a personas cualificadas para la política, ni para gestionar el partido o una administración si accede a ella, sino personas conocidas que acumulen votos.
Desde su punto de vista, Ignacio González se ha rodeado de personas que necesitan para vivir las migajas que les va dando, pero también ha tenido la suerte de encontrarse en el camino con partidos que como CC y el PP le dan cancha, porque no es lógico que tras la traición en el cabildo de Gran Canaria y el pacto en las elecciones generales con José Manuel Soria, CC siga manteniendo el pacto con el CCN.
Afirma que a la mayoría de dirigentes del CCN no les une la política, sino el poder y el dinero, y en cuanto a Ignacio González, dijo que ha creado un partido, respaldado por su padre aunque choquen de determinadas cuestiones, para ponerlo al servicio de la familia y de los negocios familiares, como se demuestra con la reforma parlamentaria del artículo 34 de la Ley del suelo que limita las construcciones en las ciudades con la excusa de arreglar el problema del fuera de ordenación que afecta a Santa Cruz de Tenerife.
Para Bety Barreto, si lo que le interesan son los negocios familiares, que se dedique a ellos y que deje de utilizar la política y las instituciones para ello, que engañe a los ciudadanos vendiendo lavadoras o ruedas, pero que no lo haga con los valores, ni con las ideologías, porque si algo tiene claro es que Ignacio González es todo un experto en vender la moto a los ciudadanos a base de falsedades.
“Yo pequé de ingenua, no, lo siguiente” dijo para reconocer que Ignacio Gonzalez la engañó “como a una china” cuando le pidió que formara parte del CCN, dicho lo cual explica que recibió críticas de mucha gente que le advertían de quién es el líder de los centristas, pero a pesar de ello siguió adelante pensando que había cambiado “porque todos tenemos derecho a rectificar alguna vez”, sin embargo poco a poco empezó a verle las mañas, hasta que decidió que no quería formar parte de la gran mentira que es el CCN.