El coherente veterano militante socialista Antonio Aguado señala en EL DIARIO estos dos artículos de Antón Losada y Javier Pérez Royo, respectivamente, que no son más que gotas de la marea de testimonios que condenan la actitud y malas mañas, del nuevo caPPo y de su partido. Solamente las almas cándidas negarán que la realidad es que se comprueba que instituciones universitarias han sacado a subasta titulaciones académicas, a cambio de favores presupuestarios, cuando no directamente pasta a manta. Eso es corrupción y no es nada ético, como dicen Losada y Pérez Royo. Y yo, Chema Tante, añado que en esta corrupción es doblemente condenable, porque, como las otras, corrompe la igualdad de oportunidades, pero además, infectan algo que debería ser supremamente intocable, la Universidad. Y diré también que es absolutamente necesario y urgente que la Universidad disponga de un presupuesto holgado y autónomo, que no dependa de subvenciones y aportaciones puntuales.