Lo cuenta EL DÍA y no sorprende a nadie.Porque era un proyecto sin más razón que la especulativa y su absoluta falta de utilidad le impide contar con la financiación necesaria. Las obras que se han hecho hasta ahora se han costeado con un crédito ilegal (porque no había previsión de retorno de los fondos) que vamos a ver quién paga. Lo que está claro es que ese puerto, que no sirve para nada, que ahora están intentando promover para el proyecto del gas, ha desvelado la magnitud del entramado de mentiras que se armó para justificarlo. Una sarta de mentiras que terminó por cargarse el magnífico puerto de Santa Cruz de Tenerife, relegado a ser puerto de cabotaje y sucio taller de reparaciones. Y vean lo que decían en LA RENDIJA en 2015 sobre las infracciones medioambientales de este puerto de Granadilla.