En Italia, Renzi se larga, por su mala cabeza. En Austria, la gente mantiene la cordura - por Chema Tante

Cuando se convoca un referéndum, hay que hacer lo que se pueda para evitar aquello de que "se pregunta una cosa, y la gente responde a otra". Es todo lo contrario de lo que hizo el tolete de Renzi con esta consulta en Italia. Se preguntaba si se reformaba la Constitución para sustituir el sistema bicameral. Pero, como vinculó el resultado a su permanencia en el gobierno, la gente tomó la votación como un resorte revocatorio, y le ha enseñado la puerta. Más de 18 puntos de diferencia marcan el rechazo y, ahora, de nuevo el follón en la política europea, gracias a Italia, Nuevas elecciones, que podrían marcar el inicio del camino al gobierno de una opción más realista, más resistente a la brutalidad neoliberal.

Entretanto, las y los votantes de Austria nos han dado un motivo de alivio. La cerrilidad de la derecha (es cerrilidad extrema, porque es derecha extrema, pero toda derecha es cerril, como sabemos muy bien en el estado español) ha encontrado un freno. La gente le ha dicho siete puntos arriba, a Europa, que la opción verde es  preferible, mucho más preferible, a la opción intolerante. El progresismo de Van der Bellen, un tipo de 72 años se presenta, qué maravilla, como una propuesta de renovación.

En Austria, las cosas se acomodan. Esperemos que en Italia, también.

http://cadenaser.com/ser/2016/12/05/internacional/1480894883_154893.html

http://cadenaser.com/ser/2016/12/04/internacional/1480868356_949244.html