Juan Carlos Borbón se propone como 'arbitro' en la lucha contra el paro. Qué sabrá él de eso
Los asesores del ciudadano Borbón le habrán dicho que el más grave problema en el estado español cuya jefatura ostenta por legado de dictador, es el desempleo. Luego, supongo, le explicarían qué significa eso. Le dirían que hay gente que tiene que trabajar para vivir, no como él. Y le harían saber que en estos momentos, por culpa -entre otros- de las barrabasadas de su familia y de sus amigos, hay empresas que han desaparecido y otras que han despedido mucha gente.
Y esos mismos asesores -no creo que haya asesoras, a Borbón no le gusta que las mujeres trabajen- le han debido aconsejar que utilice eso del paro para recuperar protagonismo. Pero, para ser arbitro de algo más que de fútbol, hace falta varias cosas, dos de ellas, imprescindibles. La primera, la autoridad que otorga el respeto y la confianza de la partes. La segunda, el conocimiento de la materia sobre la que se pretende arbitrar.
Y es obvio que el ciudadano Borbón carece de ambos requisitos. Buena proporción de la gente acorralada en el estado reino franquista de España, no siente respeto alguno ni le tiene confianza a alguien que ha demostrado una liviandad terrible en su vida privada. Y muy poco puede saber de paro alguien que no ha dado un palo al agua en su vida. Un personaje que tiene mucho que explicar, sobre su fortuna y la de miembros de su familia.
Y, dicho sea de paso, Borbón ha advertido de que no piensa abdicar. Eso ya lo sabíamos. Y no importa nada en absoluto. El problema no es el ciudadano Borbón. El problema es la monarquía.
http://politica.elpais.com/politica/2013/05/04/actualidad/1367695838_194663.html
http://www.lne.es/espana/2013/05/05/rey-propone-arbitro-consenso-partidos-paro/1407281.html