Una estupenda reflexión, con muchas aristas, de Rosa María Artal en EL DIARIO, sobre la manera en que calan en parte de las poblaciones del estado español las manipulaciones en torno del bochornoso episodio protagonizado por Juan Carlos Borbón. Lo recomienda el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado y yo, Chema Tante, insisto en que se ha puesto en evidencia, ya sin posibilidad de duda, las más que condenables actuaciones de quien ocupara con tan poca dignidad la Jefatura del Estado, pero las maniobras de la derecha, de intoxicación informativa -y en el término derecha incluyo a la vergonzante cúpula psoeística- han conseguido que algunas gentes de más o menos buena fe, no solamente estén exonerando al individuo de sus fechorías sin que encima están culpabilizando a organizaciones como UP o a quienes nos sentimos republicanos, de lo que le está psando al interfecto