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viernes, 29 de marzo de 2024 10:20h.

Paulino y José Miguel se piden a si mismos luchar contra la explotación laboral, cosa que no piensan hacer - por Chema Tante

"El Parlamento solicita al Gobierno que promueva un Plan contra la Explotación Laboral". A mí me revienta mucho todo esto, porque parte del trabajo de una mujer extraordinaria, Gloria Gutiérrez, que es de esas personas intrépidas que intentan arreglar este desastre desde dentro. Pero esta historia no tiene más valor que el de la nula voluntad del gobierno de Paulino y José Miguel para satisfacer la demanda que se hacen a sí mismos.

"El Parlamento solicita al Gobierno que promueva un Plan contra la Explotación Laboral". A mí me revienta mucho todo esto, porque parte del trabajo de una mujer extraordinaria, Gloria Gutiérrez, que es de esas personas intrépidas que intentan arreglar este desastre desde dentro. Pero esta historia no tiene más valor que el de la nula voluntad del gobierno de Paulino y José Miguel para satisfacer la demanda que se hacen a sí mismos.

La explotación laboral en Canarias está en la mitad del centro de nuestros graves problemas. Es una desgracia inherente a toda la tremenda equivocación estratégica en que se basa la economía canaria. El concepto de comercialización masiva exige precios bajos, que a su vez obligan -para preservar los beneficios empresariales, bueno fuera- a reducir brutalmente los costes laborales. 

Canarias se empeña, de manera evidentemente absurda, en operar en los niveles inferiores de los mercados. Vendemos nuestra fruta, nuestro vino o nuestros quesos, lo poco que vendemos, por debajo de lo que perece su calidad. Desbaratamos nuestros recursos naturales, trayendo mulitudes de turistas a quienes, para sostener las tarifas miserables, atendemos con productos importados de baja calidad. No hablemos de nuestra insignificantes artesanía o industria.

En definitiva, toda la vil estructura de nuestra economía se soporta en la explotación laboral.No se puede controlar el cumplimiento de la ya de por sí abusadora legislación laboral, ni exigir el cumplimiento de las jornadas de trabajo contratadas. Porque si se hiciera, entonces la economía, tal como la han organizado esta obtusa caterva empresarial y política, se vendría abajo completamente.

Por eso, esta demanda parlamentaria que la gente de la coalición nada canaria y el partido español ni socialista ni obrero se ha hecho a sí misma, no servirá para nada. Todo se queda en una fastuosa comedia, para mutua satisfacción.

http://www.sanborondon.info/content/view/65375/1/