Román Rodríguez, presidente de Nueva Canarias (NC), declaró hoy en una entrevista radiofónica que en el Archipiélago hay dos corrientes del nacionalismo: una progresista, representada por su partido, y otra conservadora, que es la de Coalición Canaria.

 Para Rodríguez “es normal y no debe preocupar a nadie” que existan dos corrientes, puesto que lo mismo ocurre en los casos del nacionalismo catalán, vasco, “e incluso en el nacionalismo español”.

 Las diferencias entre NC y CC “han sido siempre ideológicas y políticas” y no personales, “como se ha pretendido hacer creer”, apuntó, y puso como ejemplo las posiciones enfrentadas que han tenido ambas fuerzas respecto a algunos asuntos trascendentales para Canarias, como la financiación autonómica, el cumplimiento del REF en cuanto a las inversiones estatales en Canarias en los presupuestos, la aplicación de la Ley de Dependencia, el Plan Canarias o los desequilibrios territoriales.

 No obstante, estas discrepancias no evitan que se puedan dar espacios para el entendimiento, como el que se alcanzó en las pasadas elecciones generales, cuando ambos partidos concurrieron conjuntamente para garantizar la presencia del nacionalismo canario en Madrid, con un programa de defensa de los intereses de esta tierra.

 IV Congreso

Por lo pronto Nueva Canarias está centrada en su III Congreso y en la tarea de tener presencia en todas las islas del Archipiélago. “Vamos a reafirmar la opción nacionalista de izquierda que representa Nueva Canarias, porque la creemos útil para los intereses generales de esta tierra”.

 Román Rodríguez reconoció que, en este proceso, es posible tener confluencias puntuales con otras fuerzas políticas respecto a los asuntos que más afectan al Archipiélago. De hecho expresó su deseo de que se alcance el consenso sobre la reforma y cumplimiento del REF o la modificación de las leyes del territorio.

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