Les guste o no a las personas inmovilistas, esa tercera parte que rechaza una consulta, lo cierto es que la forma de gobierno monárquica fue impuesta en tiempos en que "nos apuntaban desde las azoteas", como dice mi adorada Almudena Grandes. Quienes pedimos un referémdum, somos, obviamente, la gente republicana, pero también la gente monárquica demócrata que entiende que democracia, es votar.

Ahora bien. Lo que no entiende la masa monárquica intolerable, es que, si se mantiene en su actitud, cada vez más gente que todavía cree en la monarquía acabará por entender que esa forma arcaica de organización del estado tiende por definición al autoritarismo, a la anulación del contrario.

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