Colectivos sociales de Tenerife exigen el derribo del Mamotreto de forma inmediata
Miembros de la Asociación de Amigos de la playa de Las Teresitas, Anaga y su Litoral y de la Plataforma de Defensa del Puerto de Santa Cruz consideraron en rueda de prensa celebrada este miércoles para valorar la sentencia sobre el Mamotreto dictada el pasado viernes que se tiene que ejecutar la sentencia y, por tanto, no debe demorarse ni un día más el derribo del edificio de aparcamientos levantado de forma ilegal en la playa.
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Recuerdan que no hay excusas para no proceder al derribo de ese edificio, máxime cuando los condenados tienen que sufragarlo de su bolsillo SB-Noticias.- Miembros de la Asociación de Amigos de la playa de Las Teresitas, Anaga y su Litoral y de la Plataforma de Defensa del Puerto de Santa Cruz consideraron en rueda de prensa celebrada este miércoles para valorar la sentencia sobre el Mamotreto dictada el pasado viernes que se tiene que ejecutar la sentencia y, por tanto, no debe demorarse ni un día más el derribo del edificio de aparcamientos levantado de forma ilegal en la playa. Cándido Quintana, presidente de la Plataforma de Defensa del Puerto de Santa Cruz, dijo que desde hace años ambos colectivos han venido luchando de la mano contra diversos atropellos político-empresariales, como este del Mamotreto, para valorar la lucha de Lola Schneider, asegurando que seguramente es una de las personas que más ha sufrido el expolio de la trama de Las Teresitas.
En nombre de las asociaciones, el activista social pidió valentía política, “caiga, quien caiga”, de modo que se aproveche la fundamentada sentencia dictada la semana pasada para imponer un antes y un después en la corrupta forma de actuar en Tenerife, para sanear la vida política y empezar a caminar hacia adelante con honestidad. Recordó que la sentencia dictamina, entre otras cosas, la demolición del Mamotreto con cargo a los condenados, así como que estos indemnicen a terceros de buena fe, entre ellos el pueblo de Santa Cruz a través de su ayuntamiento, al que algunos han usado de forma vil para su beneficio y el de allegados, quebrando las arcas municipales. Quintana dijo que desde los colectivos sociales agradecen todo lo que los partidos políticos hagan para reponer la decencia política perdida, al tiempo que recuerda que sin la actuación decidida de los movimientos no se hubiera llegado a esta sentencia: “Si no nos hubiéramos levantado en pie de guerra, el Mamotreto estaría hoy terminado y el pelotazo hecho realidad”. Carmen Rosa Santos, miembro de la Asociación de Amigos de la playa de Las Teresitas, Anaga y su Litoral, dijo que en torno a este lamentable caso el Ayuntamiento y su alcalde a la cabeza, José Manuel Bermúdez, nos vuelve a sorprender por la ambigua postura en torno a esta sentencia, hasta el punto de que lanza cortinas de humo constante para esconder el incumplimiento flagrante, primero de los acuerdos del pleno para llevar a cabo el derribo del Mamotreto, y ahora para hacer caso omiso a la sentencia que obliga a su destrucción. Para la activista, Bermúdez denigra a la Justicia cuando sin argumentos de peso dice que no le gusta la sentencia, dejando claro que no le gusta que se haga Justicia en una ciudad que durante décadas ha sufrido la corrupción como pocas en España: “Al alcalde no le gustará que en este caso se haga Justicia, pero debe recordar que nadie está por encima de la Justicia, ni él, ni el Ayuntamiento de Santa Cruz”. Recuerda al alcalde Bermúdez que por mucha demagogia que se haga, argumentando que el Ayuntamiento no tiene dinero para tirar el Mamotreto, la sentencia es muy clara y ejemplarizante al imponer que el derribo salga del bolsillo de los seis condenados: “La demolición del Mamotreto va a costa de los responsables de su construcción, que no lo olvide el alcalde”. Tras opinar que es probable que Bermúdez trate de ayudar a sus compañeros de partido para que no tengan que pagar de su bolsillo el dinero de la demolición, aseguró “Queremos que se derribe y que sea lo antes posible, porque nadie está por encima de la Justicia. La sentencia es contundente, está muy fundada y su rigor no tiene objeción”. |