Lali Gil (IC): “La expulsión de José Morales es una acción típica de un Estado fascista”
Lali Gil afirma que las medidas del gobierno de la derecha toman un cariz realmente preocupante, porque no solo hablamos de más paro y pobreza, sino de atentado contra las mínimas libertades
14 de junio de 2012 (10:16 h.)
Lali Gil afirma que las medidas del gobierno de la derecha toman un cariz realmente preocupante, porque no solo hablamos de más paro y pobreza, sino de atentado contra las mínimas libertades
SB-Noticias.- Medio centenar de personas se concentraban este martes en Santa Cruz de Tenerife para apoyar al activista pro derechos humanos José Morales, detenido cuando se disponía a firmar un control rutinario y posteriormente expulsado del país por el expediente abierto por participar en una manifestación contra las prospecciones petrolíferas coincidiendo con una visita a Lanzarote del ministro Soria.
Entre las personas que se dieron cita para protestar contra este abuso de poder contra una persona que libremente se manifestó contra Soria por las prospecciones se encontraba Lali Gil, integrante de Intersindical Canaria, quien mostró su repulsa total a la expulsión para la que no hay motivos para poner en práctica sino que se debe a una represalia contra el activista, al mismo tiempo que un aviso a navegantes para que ciudadanos extranjeros que residan en el país no se atrevan a salir a la calle a protestar.
La sindicalista dijo que este tipo de acciones contra activistas sociales son típicas de los estados fascistas, dicho lo cual reflexionó sobre la pasividad de la ciudadanía ante abusos de poder como este, por lo que advierte que ese inmovilismo de la ciudadanía conduce a que los políticos crean que pueden hacer lo que quieran convirtiendo al país en un Estado fascista en donde nadie está a salvo de las represalias, de manera que el día de mañana puede que se actúe contra cualquiera que se atreva a salir a las calles, aunque estemos hablando de un ciudadano español.
Desde su punto de vista, las medidas que está poniendo en marcha este gobierno de la derecha están tomando un cariz realmente preocupante, no sólo por la reducción de los derechos laborales, el sablazo a los salarios de los trabajadores públicos, al imparable crecimiento del paro, la pobreza y la exclusión social, sino por el atentado tan grande a las mínimas libertades que esta “democracia” que el PP usa a su capricho para “escacharnos” a los ciudadanos.
Gil advierte que los ciudadanos tenemos que reaccionar para que el día de mañana no puedan venir a por cualquier de nosotros como han hecho este martes con José Morales por manifestarse contra Soria, al más puro estilo del nazifascismo, ya que no estamos hablando de que se haya deportado a un delincuente peligroso, sino a un activista proderechos humanos, además padre de una niña canaria de siete años.
Recuerda que estamos hablando de que José Morales, ciudadano de origen uruguayo afincado en nuestro archipiélago desde hace muchos años, se ha sumado a las voces críticas como un canario más porque está en juego el futuro de su niña isleña, de manera que como un conejero más se sumó a la mayoría del pueblo lanzaroteño en contra de la industria del petróleo, dicho lo cual añadió que el pecado del activista fue ser extranjero y atreverse a formar parte de la protesta contra el intocable y todopoderoso José Manuel Soria, algo que el fascismo no lo perdona.
Advierte que como no nos espabilemos, el día que nos queramos dar cuenta de lo que está pasando en el Estado español, especialmente en las islas, puede que sea demasiado tarde y las fuerzas del fascismo ya hayan acabado con todo.
La sindicalista dijo que este tipo de acciones contra activistas sociales son típicas de los estados fascistas, dicho lo cual reflexionó sobre la pasividad de la ciudadanía ante abusos de poder como este, por lo que advierte que ese inmovilismo de la ciudadanía conduce a que los políticos crean que pueden hacer lo que quieran convirtiendo al país en un Estado fascista en donde nadie está a salvo de las represalias, de manera que el día de mañana puede que se actúe contra cualquiera que se atreva a salir a las calles, aunque estemos hablando de un ciudadano español.
Desde su punto de vista, las medidas que está poniendo en marcha este gobierno de la derecha están tomando un cariz realmente preocupante, no sólo por la reducción de los derechos laborales, el sablazo a los salarios de los trabajadores públicos, al imparable crecimiento del paro, la pobreza y la exclusión social, sino por el atentado tan grande a las mínimas libertades que esta “democracia” que el PP usa a su capricho para “escacharnos” a los ciudadanos.
Gil advierte que los ciudadanos tenemos que reaccionar para que el día de mañana no puedan venir a por cualquier de nosotros como han hecho este martes con José Morales por manifestarse contra Soria, al más puro estilo del nazifascismo, ya que no estamos hablando de que se haya deportado a un delincuente peligroso, sino a un activista proderechos humanos, además padre de una niña canaria de siete años.
Recuerda que estamos hablando de que José Morales, ciudadano de origen uruguayo afincado en nuestro archipiélago desde hace muchos años, se ha sumado a las voces críticas como un canario más porque está en juego el futuro de su niña isleña, de manera que como un conejero más se sumó a la mayoría del pueblo lanzaroteño en contra de la industria del petróleo, dicho lo cual añadió que el pecado del activista fue ser extranjero y atreverse a formar parte de la protesta contra el intocable y todopoderoso José Manuel Soria, algo que el fascismo no lo perdona.
Advierte que como no nos espabilemos, el día que nos queramos dar cuenta de lo que está pasando en el Estado español, especialmente en las islas, puede que sea demasiado tarde y las fuerzas del fascismo ya hayan acabado con todo.