El Pp, siempre leal a sus amigos, quiere legalizar el Mamotreto chicharrero - por Chema Tante

Me parece enternecedor lo que nos cuenta Eloísa Reverón en LA OPINIÓN. Los amigos peperos de Plasencia salen a la defensa de sus intereses.

El adefesio plantificado en la Playa de Las Teresitas tenía y mantiene una motivación clara: el sabroso negociete. Porque el empresario Plasencia no podía tolerar que la grey tinerfeña y visitante pudiera llegar a la playa y aparcar sin muchos problemas, sin pagar nada. Es la pesadilla del insaciable empresario monopolizador de los aparcamientos chicharreros. Noche tras noche, la calculadora que Plasecnia tiene por cerebro le despierta con los clings de las perras que no ingresa. Cada coche que aparca en Las Teresitas, representa unos euros menos que el se embolsa. No podía ser, no puede ser.

Por eso, en su día, el tipo despreciable maniobró en las covachuelas municipales para que sus acólitos le construyeran, con perras públicas, un edificio en el que ampliar su colosal negocio parqueador. No importaban las leyes, las normas, ni la estética, ni la belleza del entorno, ni los derechos de la gente. Por encima de todo eso, está -como demuestra la historia municipal chicharrera reciente- los altos intereses económicos del Trust de los empresarios que encabezan Plasencia y González, padre e hijos. Y esa verdad incotrovertible ha estado y está asumida por la derecha, tanto de Cc como del Pp como de una parte del PsoE. En las ciudades y pueblos de Canarias, como en el resto del estado, en los gobiernos de acá y de allá, a todas las alturas, lo que importa debe ser el interés empresarial. Entendiendo como empresarial el de las empresas amigas, claro. 

Ese edficio llamado Mamotreto era una barbaridad urbanística. Lo decía, años y años, la sabiduría popular  en las calles, y lo ha venido a confirmar la justicia. Porque la cosa resultaba tan palmaria que ni siquiera esta justicia podía obviarla. Pero el empresario Plasencia no se resigna a perder el negocio. Le va el sueño en ello. Por eso, como ya están quemados los cómplices de Cc y del PsoE, ahora Plasencia mueve otra orden de peones. Y ahí tienen al Pp, con Manuel Fernández a la cabeza -siempre dispuestos a la vileza que haga falta, para favorecer a los amiguetes- que salen a la arena con una larga cambiada. Ahora, el partido llamado popular pone en liza otra de sus experimentadas artimañas: si algo está fuera de la ley, se cambia la ley. Y a otra cosa.  

http://www.laopinion.es/tenerife/2014/12/16/pp-presenta-mocion-legalizar-mamotreto/580991.html