La homosexualidad - por Ramón Armando León Rodríguez *

 
Hace unos meses vi un reportaje en TV sobre la represión de los homosexuales en los años 70 en España.

Trataban de curar la homosexualidad como si se tratara de una enfermedad. Para ello se crearon dos prisiones, una en Badajoz y otra en Huelva donde se enviaban a los homosexuales.

En estos sitios se intentaba cambiar la orientación sexual de los presos mediante descargas eléctricas. Esta aberración no sólo se hacía en las cárceles, también se hacía fuera de ellas.

Un psiquiatra que fue entrevistado en el programa afirmaba que el método era eficaz y que un tanto por ciento de los pacientes después de la “terapia” se volvían heterosexuales. Indudablemente era una mentira más grande que una catedral. Según afirmaron las personas que se habían sometido a este experimento nazi nunca dejaron de ser homosexuales.

Que todavía, en la actualidad, haya personas, entre ellas miembros de la iglesia católica, que sigan diciendo que la homosexualidad es una enfermedad que no tiene nada que ver con la biología, es un disparate como la copa de un pino. 

Siendo yo muy joven leí una novela de Maxence van der Meersch titulada La máscara de carne.

El protagonista, un homosexual de 40 años, va relatando en su atormentada vida, las experiencias que va sufriendo. En primer lugar es rechazado por sus padres. Manuel, así se llama el protagonista, cree que nunca será feliz, porque no cree que puede existir el amor verdadero entre dos personas del mismo sexo. Cree que lo de el es un vicio y sale por las noches en busca de algún ser humano que le dé un poco de amor.

Esto sucedía en Francia en 1930. Pero actualmente en algunos países árabes han ejecutado a personas por el solo hecho de ser homosexuales.

En España aún existe mucha homofobia, en gran parte, propiciada por algunos jerarcas de la iglesia católica y el ultracatolicismo.

…¿O no? 

* Del muri en FACEBOOK de Ramón Armando León Rodríguez