Buscar
viernes, 29 de marzo de 2024 06:40h.

Luces y sombras del libro electrónico en las bibliotecas públicas municipales de Tenerife - por Francisco Javier León Álvarez

Luces y sombras del libro electrónico en las bibliotecas públicas municipales de Tenerife - por Francisco Javier León ÁlvarezAuxiliar de Archivo y Biblioteca de la Biblioteca Municipal de La Orotava

Las bibliotecas públicas municipales de Tenerife están desarrollando un importante papel para potenciar la utilización del libro electrónico a través de la plataforma eBiblio Canarias, implantada en 2014, tal y como se demuestra en una investigación realizada por Francisco Javier León Álvarez, auxiliar de biblioteca de La Orotava (Tenerife), entre los profesionales de las bibliotecas de esa isla y publicada en el último número de la revista Cartas Diferentes.

Dicha investigación estuvo centrada en el papel del libro electrónico y en el funcionamiento de esa plataforma a través de las impresiones tanto de los propios profesionales de esos centros como de los comentarios que les transmitieron sus usuarios.

El libro electrónico es ya de una alternativa a la actividad lectora a través de eBiblio y su relación directa con la Red bica. Sin embargo, no ha logrado desarrollarse a la altura del préstamo del libro impreso y en dichos centros tampoco se ha aprovechado como un medio para fomentar la lectura desde la óptica de la información digital.  

Tanto los trabajadores como los usuarios destacaron que siguen utilizando el libro tradicional para leer, sin que el electrónico lo haya desplazado ni haya tenido una gran incidencia en sus hábitos de lectura. No obstante, dentro de sus aspectos positivos destacaron su versatilidad; su software, que flexibiliza el texto hasta adaptarlo a las necesidades personales; y su carácter más barato frente al libro en papel, con una diferencia destacada en el precio de mercado.

Por el contrario, mostraron una dependencia física y emocional hacia el papel, considerándose que la lectura y los procesos derivados de ella no tenían cabida ni los mismos efectos que si se realizaban con un libro electrónico. También destacaron la ausencia de formación básica en el libro electrónico para garantizar una plena inclusión informativa de la sociedad, que está directamente relacionado con el problema de la alfabetización informacional y la necesidad de afrontarlo por la falta de conocimientos. De hecho, en las bibliotecas encuestadas no se han diseñado planes formativos sobre alfabetización relacionada con aquel. Esta ausencia de un rol formativo es extrapolable, incluso, al colectivo de personas de más de 50 años, ampliamente afectadas por la brecha digital.

En lo que respecta a eBiblio Canarias, su incorporación como un servicio público de descarga gratuita de documentos electrónicos ha contribuido a acercar a la sociedad el potencial que encierran estos últimos en el contexto de la lectura. Sus usuarios y el personal bibliotecario la valoraron muy positivamente por su accesibilidad; la gratuidad del servicio; no es necesario el desplazamiento a las bibliotecas para acceder a los libros; la presencia de diversos géneros literarios; la disponibilidad de varios ejemplares electrónicos por cada uno de los títulos, que es uno de los principales hándicaps presentes en las bibliotecas físicas, sobre todo cuando son novedades; no ocupan espacio; tienen una período de préstamo amplio y un proceso de devolución automático; y no hay peligro de perderlos ni que los ejemplares se deterioren porque no existen físicamente.    

Otro aspecto reseñable, destacado entre los referidos profesionales profesionales, es que el número de préstamos de libros físicos no ha disminuido de manera drástica en las bibliotecas a raíz de la implantación de eBiblio Canarias, manteniéndose en unos niveles semejantes a años anteriores. Esto supone que los usuarios prefieren todavía el libro impreso y que las bibliotecas siguen nutriéndose mayoritariamente tanto de este último tipo de documentos como de la presencia física continuada de aquellos.

No obstante, entre las cuestiones negativas, hay dos que son preocupantes y que afectan de lleno a los indicados profesionales: por un lado, algunos desconocen la existencia de eBiblio; por otro, hay un vacío de conocimientos informáticos entre ellos, que demuestra la necesidad de poner en práctica políticas formativas sobre la gestión de ese recurso.

Por eso, dichos profesionales demandan que mejore la comunicación entre ellos y la persona/empresa encargada del mantenimiento de la Plataforma, ya que los usuarios les plantean problemas de todo tipo —derivados de su funcionamiento— que no saben resolver porque no tienen los conocimientos oportunos y porque tampoco saben a quien recurrir para solucionarlos.

A esto se suma la cuestión de la alfabetización informacional, que afecta tanto a los profesionales de las bibliotecas como a los usuarios, a los cuales no se les ha formado para utilizar la Plataforma de una manera efectiva. Por último, eBiblio Canarias no es compatible con todos los sistemas operativos ni con todos los terminales de lectura, cuestionando el papel del sistema anticopia Digital Research Media (drm) —que se utiliza en aquella— porque genera un proceso de incompatibilidad, con lo cual se debería buscar un sistema más abierto y universal, sin condicionantes tecnológicos y más flexible a la hora de la transmisión y difusión del libro electrónico con carácter público.

Por último, se reclama un nuevo tutorial para explicar su funcionamiento y una restructuración de la web de eBiblio Canarias.

Con todo ello, el libro electrónico está aún en una fase de evolución en las bibliotecas públicas de Tenerife,  conviviendo perfectamente y en armonía con el libro impreso. A su vez, el papel de los profesionales de esas bibliotecas debe cambiar urgentemente porque se está produciendo una ruptura entre los servicios que tradicionalmente desarrollan y la expansión de la información digital, que demanda que estén bien formados en las nuevas tecnologías, que sean capaces de actuar en cuestiones básicas como la alfabetización informacional y que maximicen el rendimiento del libro electrónico dentro del marco de la lectura.

* La casa de mi tía agradece la gentileza de Francisco Javier León Álvarez

Resultado de imagen de Francisco Javier León Álvarez la orotava

 

MANCHETA 9