En su EL PERISCOPIO, Rosa María Artal hace una recopilación de viñetas referidas a la promulgación de la infame Ley Mordaza, con la que los herederos de la Dictadura se terminan de quitar la careta pseudodemócrata y se revelan como los autoritarios intolerantes que son. Y yo vuelvo a llamar la atención -Manel Fontdevila lo hace en EL DIARIO de manera genial gráficamente- que, en el fondo, todo se reduce a la cuestión de la pasta. 

La “práctica” e “intervención”  de las tendencias de pensamiento y operativas como mecanismo supremo de participación real en los movimientos de acción popular es una meta; un logro preciso y básico al servicio de una estrategia definida de cambio social… político…económico.

 Y digamos que caminando… hemos llegado al actual “estado de las cosas”: porque no se trata de seguir jugando a creer que “así son las cosas” esa es la esencia en definitiva de la mentalidad de sumisión… ¿así son las cosas?... o no sería mejor: ¡así han dejado el estado de las cosas! …

Estamos en las manos de las multinacionales, por culpa de unos políticos que no nos merecemos, que están ahí claramente para jodernos y beneficiar a quienes están beneficiando y a ellos mismos, si analizamos en donde están ahora José María Aznar, Felipe González y otr@s, y lo que están cobrando, como si de vergonzosas compensaciones se tratara.