A la memoria de Aminatou, Dalloba, Bebé, Clemence, Merveille, Pacience y otra compañera aún por identificar.  La sensibilidad humana permanente de Juan García Luján le lleva a recomendar este sentido y exasperante de Helena Maleno en PÚBLICO. Y yo, Chema Tante, me uno a la indignación y a la impotencia, porque el recuerdo de estas siete seres humanas muertas tras una devolución en caliente (y que el estado español perpetra contra toda legalidad internacional) representan el sacrificio de los centenares de miles de víctimas de la intolerancia, el egoísmo y la falta de respeto a las leyes que practican los gobiernos felones de la Unión Europea y los gobiernos ruines que colaboran con ella en la represión del derecho a la vida y el derecho al amparo. Malditos sean.