Francisco Morote, de Attac Canarias señala en PÚBLICO este artículo de Eduardo Bayona que, aunque trata un tema que está en la génesis histórica de las tensiones territoriales en el estado español, creo que no se le ha prestado la atención debida. Es que, aunque mastuerzos como Paco Chavanel digan que esto de la historia no tiene nada que ver con ello, todo el problema viene de la ceguera de quienes se empeñan en negar la realidad. Y la realidad es que eso de la España como un ente indivisible no se mantiene. Lo que se entiende por España está constituida por un grupo de reinos -es decir, de naciones- que por diversas circunstancias, todas ellas ajenas a la voluntad de sus respectivos pueblos se encontraron metidas en un solo ente político. Y lo de las diferentes naciones - es decir, reinos- queda confirmado por una decisión nada menos que del Tribunal Supremo. Y yo, Chema Tante, recuerdo, como anécdota significativa, que entre los títulos nobiliarios que ostenta el actual no electo Jefe del Estado, figura el de "Rey de Canarias".

Habiendo tenido conocimiento de que la candidatura  En Común que se presenta a las elecciones autonómicas en Cataluña, en la que participa Esquerra Unida i Alternativa, se propone regular la prostitución, la Comisión Política del Partido Feminista de España,

Antonio Aguado y Julián Ayala señalan en PÚBLICO el artículo en el que Fernando López Agudin advierte de la manera en que la derecha está utilizando la crisis catalana para, una vez más acorralar y dividir a la izquierda y de esa manera, neutralizar toda posibilidad de mejora social. En todo caso, López Agudin no pierde el optimismo. Cosa que yo, Chema Tante, lamento no poder compartir.

Pues lo que dice Vicenç Navarro en este artículo que recomienda Francisco Morote, de Attac Canarias, en PÚBLICO (en el blog del autor no está disponible) es algo de lo que venimos hablando todos los días. El sensato profesor recuerda que la tremenda Gran Recesión o Gran Depresión sigue causando sus estragos, que la pretendida recuperación es un embuste superlativo y que la Corrupción sigue comiéndose los recursos públicos. No deja de afearnos Navarro a las independentistas (yo, Chema Tante me doy humildemente por aludido) que pongamos la independencia por delante de los problemas sociales; e incluso que sostengamos que la independencia  pueda ser la solución para los problemas sociales. Yo creo que el profesor puede tener razón, pero también no tenerla. Depende de cómo y para qué y quienes obtengan la independencia. En el caso catalán, Navarro dice, con razón que el ahora independentista PdeCat ha sido cómplice del Pp en la génesis de la Depresión. Pero obvia que la fuerza independentista no radica en Cataluña ahora en ese PdeCat, sino en  Esquerra y en las CUP, además de Omníum y ANC, poco sospechosas, ninguna de ellas, de neoliberalismo.

Juan Carlos de Sancho llama la atención hacia este artículo, este sitio OBJETIVO ARTE, esta plataforma SEGUIR CREANDO y este ESTATUTO DEL ARTISTA. Quien se firma Ramón S.denuncia otro más de los esperpentos jurídicos de este inconcebible estado de derecha al que la enfermiza codicia neoliberal lleva a adoptar crueles decisiones que no tienen sentido alguno. Que un jubilado no pueda dedicarse lucrativamente a la creación resulta absolutamente aberrante.

Denso, extenuante, difícil de leer, pero demoledor artículo del catedrático Javier Ruiz Collantes sobre las reales dimensiones de la fogalera catalana. Aparece en PÚBLICO y lo señala Julián Ayala. Collantes abre una obvia, pero generalmente ignorada: quién paga la cuenta de todo esto que llaman "solidaridad" entre los territorios del estado español. Y ya puestos, Ruiz Collantes recuerda que las diferencias no son entre territorios, sino entre clases sociales. Y nos hace ver que si hay desigualdades en este estado, es porque las rentas altas y las empresas le quitan el cuerpi a sus responsabilidades fiscales. Por tanto, esa transferencia de recursos de Cataluña hacia el estado, cuyo riesgo de pérdida está detrás de la rabiosa resistencia centralista a las reivindicaciones catalanas, son las rentas bajas, las del trabajo, quienes las pagan. Amigo, amiga, visto así la cosa toma un color distinto. La lástima de todo esto es que las masas henchidas de ardor guerrero que cantan el "a por ellos" no tienen la capacidad lectora y reflexiva necesarias para entender algo tan claro.

España es ese país que saca su bandera cuando la selección gana o Catalunya quiere votar, pero que la dejan empolvándose cuando nuestros políticos se arrodillan a los poderes internacionales;

En artículo que señalan en EL DIARIO Julián Ayala y Antonio Aguado, Suso de Toro hace ver la manera en que el follón montado por el soberanismo catalán ha sobrepasado las fronteras de aquella nación y ha llevado la cuestión a todo el territorio del estado. Es que es mucho tiempo soportando las cutres manifestaciones del españolismo cerril, que ha llegado a la cúspide con esas despedidas a las policías y el atroz "A por ellos"

El domingo 27 de agosto el periódico La Opinión de Tenerife anunciaba en su primera página la noticia de que “Casi 20.000 pensionistas isleños cobran dos o más prestaciones al mismo tiempo”. En páginas interiores –concretamente, la 16– el redactor Moisés Álvarez Montero desarrollaba la noticia. Y lo hacía de la manera a que nos tienen acostumbrados los medios informativos al uso cuando tratan cuestiones que afectan a las clases más desfavorecidas de la sociedad.