Marcos Roitman Rosenmann,  en el digital mexicano LA JORNADA trata con maestría la dignidad humana. Francisco Morote, de Attac Canarias lo señala y a mí,, Chema Tante, no me cabe otra cosa que suplicar que nadie se pierda un notable texto. La lucha social es la dignidad humana. 

Todo un tratado de las maldades neoliberales, en las respuestas de Noam Chomsky a Vijay Prashad en esta entrevista en NEWS CLICK que difunde CTXT, en meritoria traducción de Álvaro San José. Lo señala el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado y yo, Chema Tante creo que confirma lo que decimos, por todo el mundo, sobre el neoliberalismo. Que es el pero fascismo que pueda haber. La tesis malvada del beneficioa toda costa, llevada a sus más funestas consecuencias. Lo están haciendo, destrozando la habitabilidad del Planeta y matando gente, mientras tanto. Y no se pierda nadie la referencia a Cuba que hace Chomsky como broche de oro a la entrevista.

Luis González Reyes, en artículo que señala en EL SALTO Francisco Morote, de Attac Canarias, nos imparte una serena lección sobre las muchas enseñanza que pueden extraerse de este drama virológico que azota a la Humanidad. En verdad, un artículo de muy obligada y detenida lectura. Claro, añado yo, Chema Tante, que, como de costumbre, quienes tienen que leer estas cosas, la gente que gobierna y que mangonea la economía, ni las lee ni, mucho menos, las asumen

Mientras la grey psociata intenta amarrar los votos del "a por ellos", con el guineo de que "la prioridad es la integridad de España" y adivirtiendo de confrontaciones civiles, l gente soberanista seguimos gritando en paz nuestra demanda del derecho a la autodeterminación. Esta vez, en Euskadi, casi 200.000 personas. Los y las nacionalistas de Espaá destilan su bilis y su ira, la gente soberanista, lo hacemos con la sonrisa de quien tiene la confianza de la razón.

LAS SEGUNDAS TRINAS de Javier Enríquez Serralde; una escritura exquisitamente lúcida

Como resultado de una fijación casi enfermiza, desde siempre me he sentido inclinado, y fascinado, por las mitologías griega y romana. Un dibujo a lápiz que hice, raya los cuarenta años, de una bella composición en mármol representando el Rapto de Prosérpina por el dios Plutón, es fiel testimonio de lo que afirmo. A la mitología hay que respetarla. Yo lo hago. Porque dicha creencia no es más ni menos que el producto de una necesidad vital del hombre en un momento determinado de la historia de la Humanidad.