Cuántas veces hay que recordar que las críticas a las curias, en Roma y en los estados, son eso, a las curias, pero de ninguna manera a quienes viven con honestidad su fe, siguiendo las exhortaciones de amor y caridad de su Fundador e, incluso, haciéndolo en muchos casos, con abnegación y heroísmo. El padre Ángel es uno de esos numerosos casos. Y su crítica a quienes se quedan en los ritos y las formas de la religión, pero abjuran de los conenidos sustanciles de ella, merece ser reconocida.
El coherente veterano militante socialista Antonio Aguado destaca este lúcido artículo de Carlos Elordi en EL DIARIO que adopta y exhorta a adoptar la actitud debida, frente a la escandalera montada por la cerril derecha ante la noticia de un gobierno democrático de signo progresista.
Antonio Aguado señala y comenta este artículo de Antonio Gómez Movellán en DIARIO 16, en el que aborda el desagradable papel jugado por los partidos de dereha, Pp, C's y PsoE, rechazando una proposición de Podemos para que el estado cumpla el mandato constitucional de aconfesionalidad, eliminado la transmisión semanalen la televisión pública de un rito religioso católico.
Lo de la defensa del Burkini de forma irresponsable por parte de “modernos” occidentales, haciéndolo de forma indiscriminada, es una solemne tontería, fruto de nuestro liberalismo decadente y poca solvencia ideológica.
Dámaso Arteaga, concejal de Coalición Canaria por Santa Cruz de Tenerife, responsable del Área de Bienestar Comunitario y Servicios Públicos, asistió el pasado jueves 16 de junio a la misa-homenaje al criminal fascista de lesa humanidad, Francisco García Escámez, organizada por la derechista y nostálgica, Fundación Marqués de Somosierra, donde se alabó la figura de este militar genocida, el mismo que asesinó a miles de republicanos y ordenó a sus sanguinarios soldados moros, legionarios, requetés y falangistas, la salvaje violación indiscriminada de mujeres, los fusilamientos de los habitantes de pueblos enteros, en el mortal avance de sus tropas desde Pamplona hasta Madrid.
Lo cuenta José María Garrido en EL PLURAL. Como todos los años, el párroco de Los Jerónimos de Madrid, pide que el ejército nos meta en cintura a la gente de izquierda. El facherío nacionalcatolicista está aterrado ante "el auge de la extrema izquierda". No se enteran sus paternidades de que la izquierda ha estado siempre presente en todos los pueblos que pululamos en el estado español. Lo que ocurre -y eso es lo que les angustia- es que cada vez menos gente se cree las patrañas del PsoE y cada vez más personas se unen a los partidos organizados. No somos más. Somos la misma gente. Lo que pasa es que ya nos estamos entendiendo. Cosa que no pasaba, por cierto, desde febrero y julio de 1936. Ya nos ha costado, ya.
En el estado español lo que dice la prensa internacional sobre el gravísimo genocidio social se oculta, se vierte cal viva sobre la información veraz, se omite en los informativos de la carroña mediática la verdadera y terrible realidad de un pueblo masacrado, tratando de que se desconozca la aniquilación humanitaria que está generando el gobierno de los sobres, los millones de chiquillos/as que pasan hambre, que junto a sus desoladas y tristes familias, ven que no hay salida de un túnel de terror y miseria.