Francisco Morote, de Attac Canarias, señala en y comenta este artículo de Francisco Serrano Mancilla en el digital mexicano LA JORNADA y en un montón de medios más, por todo mundo hispano parlante. Y yo, Chema Tante, agrego que la cuestión es muy sencilla de pensar, pero muy complicada de poner en práctica, porque la endemoniada deuda es, a la vez, un colosal negocio para la banca internacional y un resorte de dominación de los pueblos, por la extorsión a los gobiernos. Se trata de una lucha de resistencia al neoliberalismo, que exije una acción ciudadana decidida.
La llegada de la II Republica, fue motivo de esperanza y un revulsivo en las capas populares, que habían sido sometidas a una gran opresión. Por eso y en alguna medida se contemplaba como algo normal, el comportamiento de venganza de determinadas organizaciones políticas y sindicales de izquierda y grupos incontrolados. Sin embargo el análisis que hacían de este tipo de comportamientos los veteranos socialistas republicanos, era de desacuerdo, máxime porque le estaban haciendo el juego (como así se demostró) a la derecha y a sus poderes fácticos, para argumentar una sublevación y golpe de estado de militares facciosos, contra la República legalmente constituida.