Iván Alejandro Hernández escribe en EL DIARIO CANARIAS AHORA sobre otra de las rimbombantes boberías sin contenido, tan frecuentes en los gobiernos de Canarias. Lo señalan y comentan Federico Aguilera Klink y Chema Tante
Armando G. Tejeda en LA JORNADA, en crónica recomendada por Francisco Morote, de Attac Canarias, abre la puerta, nunca cerrada del todo, a la melancólica desesperanza. Y yo, Chema Tante, digo que sigue siendo muy dura la lucha contra el cambio climático. Contra quienes desprecian la gravedad de la catástrofe que aniquila la habitabilidad del Planeta. Muy dura, sí, porque esta actitud de la gente más grande, la gente más rica, le da alas a la imbecilidad de otra, más chica. Seas presidente de Canarias, seas un hotelero balear, una abogada de Cáceres, o una mamá o papá con familiap, USA, China, India o Australia te dicen que no importa, puedes seguir mandando decenas de millones de carbono a la atmósfera con el turismo masivo, seguir derrochando energía eléctrica, usar el coche particular para ir a la esquina a comprar pan o llevar a la prole al colegio. No hace falta que hagamos nada. Hasta que la Pachamama, Gaia, la Naturaleza o la Providencia, lo que ustedes quieran, nos vuelva a dar otra contundente advertencia. Ante esta auténtica calamidad, esta plaga bíblica del desastre climático potenciado por la imbecilidad de la gente de Bíden a Ángel Víctor, de Xi a Sánchez, la gente que nos queda un cerebro en uso tenemos dos alternativas. Una, lavarse las manos y unirse alegremente a la vorágine desarrollista o seguir peleando y denunciando. Desde luego, Morote y Tante, con tanta gente que se aloja en La casa de mi tía, no nos uedaremos en silencio. Al menos, "Cuando el último árbol sea cortado, el último río envenenado, el último pez pescado", y los y las imbéciles descubran que se han cargado la casa común, La Tierra, entonces algunas personas podremos sentir que no ha sido culpa nuestra.
Ricard Jiménez entrevista en CONTRAINFORMACIÓN y REBELIÓN a Elena Idoate, de NI UN PAM DE TERRE, sobre la oposición ciudadana a la ampliación del aeropuerto de El Prat. Explica Idoate los perjuicios, no solo de ampliar el aeropuerto sino de no reducirlo. Porque los aviones contaminan de muchas maneras. "Exactamente", dice Federico Aguilera Klink al señalar la entrevista y yo, Chema Tante, agrego mi magua comprobando como la sensatez popular se estampa contra la insensibilidad y la idiotez oficiales.
Dean Baker, Aiden Lee en CEPR, Centro de Investigaciones Políticas y Económicas, presentan este informe sobre un espinoso y crucial asunto, el empleo y la descarbonización. Lo señala Federico Aguilera Klink. Y Yo, Chema Tante, devo decir que con esto se debería conjurar el pánico que les entra a quienes dirigen la política, que todo lo basan en términos de empleo. Es que, aunque se pierdan puestos de trabajo por eliminar una actividad perjudicial, no por ello debe dejar de elimarse, sino buscar alternativas. Pero es que, además, la pérdida, como demuestran Baker y Lee no es tan notable.