El arte de maleducar, María Mir-Rocafort en LA HORA DIGITAL
Otra vez que hay que coincidir con la reflexión de María Mir-Rocafort, que relata en este artículo en LA HORA DIGITAL. Desde luego, yo, Chema Tante, comparto la idea de que el triunfo de Franco, cuyas consecuencias seguimos padeciendo, ha sido el adocenamiento, la zafiedad, las deficiencias que introdujo el dictador en la educación. Precisamente, el mayor éxito que la República había cosechado en su corta existencia. Claro que el tirano actuó de manera malvadamente sistemática. Partió del aniquilamiento, vía asesinato, prisión, inhabilitación o exilio, de toda la inteligencia, el conocimiento, de los pueblos que navegan en España. Un catálogo deprimente de nombres que sería necesario utilizar varios tomos para nombrar en su totalidad. Empezando por ese magnífico cuerpo de maestros y maestras que desde los principios del siglo XX habían ido poniendo los cimientos de la libertad. Decapitando el conocimiento, colocando la mediocridad más odiosa en la educación, mezquineando con el presupuesto y contando con la colaboración de la mentecata enseñanza religiosa, el nazifranquismo consiguió legarnos estas sociedades actuales, estremecidas por el problema del futbolista de turno, mientras las conducen a las UCI y cuatro sinvergüenzas, desde la política y desde la banca, les roban y estafan con toda impunidad.